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Detrás del golpe, el cártel de Televisa
María Teresa Jardí
Detrás del golpe a Aristegui está claro que se puede ubicar la venganza del destape del cártel, por encima del resto de cárteles de narcotraficantes, que quedó claro que es Televisa cuando la detención en Nicaragua de los operadores de las camionetas con los logos transportando dólares (para comprar droga como se torno en diáfano para el luego acobardado o comprado gobierno nicaragüense). Detenidas personas, vehículos, celulares donde aparecían las llamadas a altos empleados televisivos de ese cártel que fue destapado por investigaciones del equipo de Aristegui.
Televisa es el poder de facto hacedor de productos televisivos para sentarlos en un país previamente educado por los Chabelo y los Chispiritos y devaluado con las telenovelas descerebrantes donde los ricos lo pueden todo y a los pobres no les queda más que aguantarse porque así se los manda La Guadalupana, que como bien ha dicho el Papa Francisco (no con esas palabras pero sí con ese sentido) es la responsable de que el diablo a México haya convertido en el Infierno en que millones de mexicanos habitamos.
No se refiere el Papa a la Virgen de Guadalupe. Pero lo dicho está dicho y está muy bien dicho. Lo que dijo Francisco es que debido al enorme catolicismo el diablo se ensaña con los mexicanos. Lo que traducido por mí es en palabras lo mismo que arriba digo.
Peña Nieto es el peor Ejecutivo del mundo, pero hasta para alguien sin cerebro a la vista, lo de quitar a Aristegui, luego de nombrar a un policía asesino como ministro, a quien más golpea es a Peña y al PRI.
Lo que quiere decir que el cártel de cárteles que es Televisa no sólo se ríe del pueblo al dictar las despreciables medidas, sino que también ataca al partido que le permitió llegar a convertirse en ese poder de facto que quién sabe lo que tiene en mente si no acabamos como sociedad con el negocio criminal, desinformador y deseducador, que se ubica como poder de facto por encima del Ejército y hasta de la Marina, más del gusto del imperio yanqui.
Claro, también molesta la comunicadora con sus investigaciones, como la prensa escrita que las realiza, a los Gutiérrez de la Torre, en un país donde una buena parte de la mafia política es pederasta, la que también disfruta de jóvenes mujeres sometidas a la trata de personas. Nunca se ha aclarado lo de la joven extranjera “accidentada” en una fiesta del “niño” dueño del Partido Verde. Pero entre el conjunto de molestias que causa afecta más a Peña y al PRI la salida, que el dejar a Carmen seguir con su programa. La que gana es Televisa y entender que acabar con su negocio televisivo —el otro que se maten entre ellos—, apagando y no pagando un peso por las televisoras, es nuestra más sencilla defensa y es lo que tendríamos que empezar a hacer todos sin más tardanza.
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