Es motivo de orgullo que, a pesar de que han querido destruirnos, no lo han logrado ni lo lograrán. No sólo porque tenemos autoridad moral, sino porque las mujeres y los hombres que participamos en esta lucha, profesamos un profundo amor por nuestros semejantes y, más allá de alevosías y frente a todo tipo de adversidades, mantenemos la firme convicción de construir una sociedad más justa, más humana y más igualitaria
I.- A solicitud de un nazi-priísta de Puebla, donde nació el temible matón Gustavo Díaz Ordaz, es que llegando de Australia y China, donde los capitalistas le exigieron seguridad a sus inversiones,Peña enseñó su rostro deAtenco. Bajando de las escaleras del lujoso avión que ha comprado –gestionado por Calderón– de inmediato recetó a los reporteros que lo esperaban, que traía la espada desenvainada para “utilizar la fuerza pública” (soldados, policías, marinos, fuerza aérea) para por aire, tierra y mar reprimir a los mexicanos que sigan protestando contra la negligencia gubernamental; y que los sucesos de Ayotzinapa y Tlatlaya noson motivo para criticar al peñismo y a los desgobernadores, que son intocables y pueden hacer lo que les venga en gana: abusar de sus funciones, incumplir sus obligaciones y robar para enriquecerse, que para eso son los nuevos déspotas. Y donde la Constitución, la democracia, la República y los derechos humanos, son un adorno para impresionar a los inversionistas que exigen seguridad para venir a llevarse el petróleo, los minerales, el gas y todas las riquezas, a cambio de que las contrarreformas peñistas tengan éxito en el neoliberalismo económico para explotar como esclavos a los mexicanos.
II.- En Jalisco, integrantes del PAN se han uniformado como las juventudes nazis y en Pueblaun dirigente del PRI juvenil ha solicitado en su portal que regrese Díaz Ordaz. Además, demandan que regrese Victoriano Huerta y con la inspiración de Hitler, exigen a Peña que haga del país otroAtencoy pare las protestas por la criminalidad de funcionarios-sicarios que secuestran, asesinan y practican la trata para prostituir a niños y mujeres, en lo que ya es, desde los gobiernos municipales, estatales y federal, un terrorismo gubernamental contra la población. Peña ha decidido usar la violencia, más violencia, policiaca, militar y marina para contener el malestar social; y de una vez por todas suprimir las garantías y los derechos, node los delincuentes y sus cómplices dentro de las fuerzas armadas y los funcionarios, sinode los mexicanos que padecen injusticias. Y no quiere escuchar sus pareceres en las consultas porque dirán que carecen de empleo y son víctimas de la burocracia del IMSS y los centros médicos públicos donde no son atendidos.
III.- Peña se ha quitado la máscara y ha enseñado el rostro que le conocíamos cuando desgobernó al Estado de México y lo ensangrentó con represiones a sangre y fuego. Al llegar de su viaje de turista ya nos amenazó con visos de cumplirlo, que no permitirá que el pueblo se solidarice con las protestas y critique a los gobernantes por su mal desempeño. Estamos ante un parteaguas del peñismo que se tambalea en el poder presidencial y quiere
sostenerse al precio que sea. Esto significa que el díazordacismo del 68, a petición de un priísta poblano y consecuente con el nazismo panista que acaba de dar la cara enJalisco, está de regreso para nuevos Tlatelolcos y Atencos. Es una política estilo made in China: capitalismo salvaje y bárbaro; orden y silencio al precio que sea. Y el precio anunciado es la represión.
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