Abren el hocico y les sale mucha mierda

¡¡Exijamos lo Imposible!!

Por Esto!
Prólogo Político

Alvaro Cepeda Neri

Zedillo y Calderón, cállense
el hocico, par de incapaces

I.- Digo que Zedillo –el criminal de Acteal, Aguas Blancas, etc.– y Calderón, el autor intelectual de más de 100 mil homicidios, y con Fox, del desastre económico que vive el país, son hocicones. Esto no sólo por tener los labios abultados, sino en forma despectiva por esconderse en la impunidad, cuando debieron haber siendo juzgados por sus estupideces. Hablan mucho sobre lo que debería hacer Peña, cuando en sus sexenios ellos nada hicieron al respecto, salvo abusar del poder presidencial que ha llegado a su tope y está a punto de desbordarse, al grado de que anda en el aire la renuncia de Peña, con todo y que éste trate de sumarse a la indignación social por lo de Ayotzinapa y Tlatlaya, cuando ha sido el directamente corresponsable con la negligencia militar y policiaca, para actuar en consecuencia a raíz de la matanza y secuestro de estudiantes con la complicidad de la delincuencia organizada, el defenestrado desgobernador Heladio Aguirre (¡llévenlo a juicio político, señores senadores!) y la “pareja imperial” de los Abarca que tienen a Guerrero y al país, al borde un alzamiento popular con visos de revueltas revolucionarias para deshacernos de los malos gobiernos que han puesto en jaque mate a las instituciones por su ineficacia.

II.- Son un par de lenguas prontas. Sus desgobiernos fueron un completo desastre social: más pobreza, desempleo, inseguridad, enriquecimiento de funcionarios que siguen el ejemplo de Salinas, su maestro en perversidades, entreguista al exterior, partícipe en el crimen de Colosio con Zedillo y el temible José Córdoba Montoya. Protegieron a los ricos (Salinas le regaló Telmex al multimillonario Slim… ¿cuándo habrá un impuesto a la riqueza mal habida, el saqueo, inversiones y depósitos en paraísos fiscales? Pero ya fuera del poder presidencial, al que fortalecieron autoritariamente para ejercerlo como poder para matar, reprimir, encarcelar... ¡con toda la impunidad!, se van de la boca como hocicones que son. De nuestro dinero, ambos reciben oficina, guardaespaldas uniformados y una pensión millonaria; aunque Zedillo renunció a ella, jubilado del Banco de México y con asesorías de empresas que privatizó a favor de estadounidenses que lo tienen contratado y, de pilón, es “profesor” en Yale donde imparte prácticas antiglobalización.

III.- Zedillo fue siempre un burócrata derechista y en eso coincide todavía más con Calderón. Los dos fueron mediocres ocupantes del cargo presidencial que, si bien ya deshonrado con Salinas, y el payaso de Fox, el tal Ernesto y el tal Felipe absolutamente nada hicieron para apuntalar el Estado de Derecho. Sus acciones políticas y económicas, proempresariales a favor de los banqueros, contribuyeron a un mayor deterioro de los mexicanos que con el peñismo sobreviven, no menos de 50 millones en la miseria. Su incapacidad para coordinar al Estado Federal y permitir ser parte de la corrupción y solapar la impunidad, los muestra incapaces y casi imbéciles, desautorizados para abrir la boca y desde sus escondrijos censurar a su igual, casi su clon: Peña.

cepedaneri@prodigy.net.mx