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Respetar los derechos
María Teresa Jardí
Característica de respeto podría ser, en un Estado de Derecho, lo que hace tiempo que ha dejado de ser México, el no esposar a quienes no es necesario esposar. Pero incluso las series televisivas más serias, las yanquis, ya se sabe que lo que buscan es que nos creamos todos que el terrorismo amenaza al imperio terrorista. Las francesas y las suecas, italianas, inglesas... enseñan que a los detenidos, aun cuando no se tiene la seguridad de que sean los delincuentes, se les esposa incluso para no encontrarse con el hecho de que se hagan daño ellos mismos.
La exhibición ante la telebasura, que tantas explicaciones ha ameritado por parte del Procurador General de la República e incluso por parte del Secretario de Gobernación de la misma, porque se les olvidó esposarlo y como ni aquí ni en el resto del mundo al “gobierno” mexicano se le cree ni “el bendito”, se dio así porque fue una entrega concertada.
Vayan ustedes a saber qué es lo que le ofrecieron al Z- 40. Quien si se entregó es porque él ya no mandaba. Y al que le estarán sacando la información los yanquis que actúan en México como si estuvieran en su casa. Siendo claro que el relevo estaba desde antes de la entrega a sus “cuates”, que tan bien lo tratan, lo que es la nota por supuesto, estaba elegido o al menos definido. Necesitan que se parara de hablar del pacto por encima del resultado de las elecciones ganadas por el abstencionismo.
Alarmante es el que se preocupen por “respetar” tanto al que venden, porque quizá es un desalmado individuo. Lo que no les sabrá a Peña y compañía ese sujeto que, al parecer, debe tantas vidas. Es difícil creer en nada que venga de la mafia que, adueñada del poder, hace como que “gobierna”. Pero además esa misma clase lo hace más difícil, porque aunque se entienda que tiene su corazoncito para sus amigos, debería priorizar la inteligencia pensando incluso en el mensaje que envía, que no es el de respeto a los derechos humanos, y ahí está Pathistan preso como venganza y Atenco como ejemplo.
La no violación a los derechos humanos nada tiene que ver con esposar o no a un detenido y tampoco tiene eso que ver nada con el respeto al debido proceso.
Culpar a los derechos humanos es como ensañarse con el mensajero. De lo que dan ejemplo los yanquis con la saña contra Bradley, Assange y el resto de los que hartos comparten la información que no tendría que existir porque nunca el mundo debió permitir a los yanquis actuar como el terrorista al que todos tendríamos que combatir.
No violar los derechos aquí pasa porque no interroguen ni participen ni paseen como Pedro por su casa por nuestro territorio elementos criminales que pertenecen a la CIA y a la DEA. Porque no se entrene a los militares mexicanos como kaibiles...
Es como lo de “La Bestia”. Siempre a toro pasado se encuentran los muertos o llegan a los albergues los heridos. Pero ninguna vigilancia para detener a los criminales que hacen el trabajo de asesinar en México a los migrantes que no quieren que lleguen a su territorio los yanquis.
Característica de respeto podría ser en un Estado de Derecho el no esposar a quien no es necesario esposar. Pero en México es deferencia al “cuate” y no respeto lo que se nos acaba de mostrar. Más allá de que sea también evidencia de la corrupción mata la inteligencia...
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