Corrupción la q' le abrió la puerta al Chapo

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Cuatro días de tunda al Gobierno desde el extranjero

Ya no se siente lo duro, sino lo tupido… Al Gobierno federal le han llovido críticas no sólo en México, sino de autoridades, especialistas en seguridad e influyentes medios de todo el mundo por la fuga de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, pero también por las explicaciones que ha venido dando en los últimos días.

Cada vez que una autoridad del Gobierno trata de explicar a la prensa cómo fue que el capo se les fue entre los dedos, comenzando por el propio Presidente Enrique Peña Nieto y siguiendo por Miguel Ángel Osorio Chong, titular de la Secretaría de Gobernación (Segob);Monte Alejandro Rubido García, encargado de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), y Arely Gómez González, quien encabeza la Procuraduría General de la República (PGR), más dudas brotan ante versiones inverosímiles y videos que sólo han agregado más leña al fuego.

El punto es que nadie reconoce que fue la corrupción la que le abrió la puerta al “Chapo”, el presunto narcotraficante más poderoso del mundo, y a quien, al parecer, en la prisión de “máxima seguridad” del Altiplano tampoco nadie vigilaba a conciencia.

Han pasado cuatro días desde que la noche del sábado pasado, Guzmán Loera se fugó del Centro Federal de Readaptación Social Número 1, situado en el Estado de México, y el Gobierno federal suma a diario más y más duras críticas en México y desde el extranjero, por el “imperdonable” escape del hombre cuya aprehensión en febrero de 2014 significaba una de las escasas, muy pero muy pocas, victorias de esta administración en manos de priistas.

Medios, autoridades y expertos hablan de “ineficiencia”, “encubrimiento”, “omisión”, “mentiras”, “patrañas”… y, claro, “corrupción”.

La tunda ha sido durísima y el prestigio del Gobierno ha sido en estos cuatro días arrastrado ya no por el suelo, sino por un túnel oscuro, más siniestro que el que supuestamente usó “El Chapo” para escapar de su encierro.

Y la cosa no pinta para aminorar, al contrario: entre más días pasen sin saberse nada del jefe del Cártel de Sinaloa, y entre más explicaciones incoherentes se dan y no se reconoce a la corrupción como la causa central del deterioro del sistema de justicia, el Gobierno peñista cava un hoyo más y más hondo.
(SINEMBARGO.MX)