Por Esto!
O nos acostumbramos o...
María Teresa Jardí
En México el Estado de sitio se ha iniciado en Oaxaca. Pero más vale que sepamos que lo mismo se va a hacer con el resto de estados de la República. Y de todas maneras, a estas alturas, ya deberíamos haber entendido que México, además de en cementerio, se ha convertido de múltiples maneras en una cárcel. La conveniente “fuga” de “El Chapo” convertida en apología del delito, fue acordada como distracción para la sociedad deseducada por Televisa convertida en productora de circo. Circo que incluso invita a la xenofobia y promueve la tortura como chiste, sin percatarse de que contra todos acaba por volverse la violencia.
En México el Estado de sitio se ha iniciado en Oaxaca. Pero más vale que sepamos que lo mismo se va a hacer con el resto de estados de la República. Y de todas maneras, a estas alturas, ya deberíamos haber entendido que México, además de en cementerio, se ha convertido de múltiples maneras en una cárcel. La conveniente “fuga” de “El Chapo” convertida en apología del delito, fue acordada como distracción para la sociedad deseducada por Televisa convertida en productora de circo. Circo que incluso invita a la xenofobia y promueve la tortura como chiste, sin percatarse de que contra todos acaba por volverse la violencia.
Hace muchos años, cuando viajaba a Oaxaca, la orden de la SEP era que a los niños se les entregara el certificado de primaria sin saber leer ni escribir. Más que su nombre, añado yo, para firmar las listas de raya que no tardarán tampoco en imponerse de nuevo en nuestro país.
Cuando la APPO también hubo una traición interna. Lo sé de cierto. Y el golpe a la CNTE lleva de entrada como traidor al impresentable que a nombre de eso que se llama “izquierda” desgobierna en Oaxaca tornado en traidor por el otro favorito que manda en la Gobernación de Peña, que no es Osorio, que es Miranda.
No hay mafioso vividor, en México, de la “política” que se salve de su responsabilidad en los males que aquejan a los mexicanos. Tantos y tan graves y violentos que tienen paralizado a un pueblo convertido en carne de cañón.
Se acabó con el Estado, la corrupción fue convertida en regla, corrupción que incluye a los ministros de una Corte tornada en esperpéntica, vendidos, los ministros y magistrados, a cambio de los altos salarios que les otorgan. Porque también el Poder Judicial es hoy un producto vendible. Como lo es el Legislativo no menos esperpéntico.
La FIFA es una mierda y el resultado del comprado juego de México contra Panamá a la altura de la misma. A la altura de la compra en el circo del que Peña maneja el látigo para golpear a unos y el dinero para comprar a otros. Peña que hasta cree que con falsas fugas espectaculares como la de su compinche “El Chapo” el circo va a dar para matar el hambre y no enterarse de boca en boca de las ejecuciones diarias.
Un estado agotado que ya no merece escribirse con mayúscula. Un lugar donde se ataca a los maestros. Donde se acaba con lo logrado en aras del respeto a las naciones indígenas que es lo que se acaba de un plumazo en Oaxaca por una Gobernación tan siniestra que hasta los menos malos apoyan la no salida de Osorio Chong porque mucho peor sería Miranda, otro favorito de Peña, como Castillo, convertido en el gran represor de todo lo que huela a cultura. Empezaron con Toledo y no van a cejar hasta acabar con todas las normales para privatizar, vendiendo, el acceso a la educación, desinformadora también, para los hijos y nietos de los que desde hace varias décadas dejaron de ser políticos para convertirse en mafiosos y acabaron con el Estado mexicano, al punto de que el territorio se encuentra convertido en cementerio.
Antes se decía que si se acababa el mundo nos veníamos a Mérida...
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