Una verdadera vergüenza para el gobierno

¡¡Exijamos lo Imposible!!
Homozapping

Peña no tiene control y debe renunciar
Autor Invitado
José Carlos Moreno

La figura presidencial ya no se está pudiendo mantener. El gran poder mediático del PRI-Televisa ya no es lo que antes fuera, ya le es mucho más difícil sostener los errores presidenciales y la impopularidad de este presidente es la más alta que se haya registrado en este país.

El último tropiezo, el escape del Chapo, no es otra cosa que una verdadera vergüenza para el gobierno federal y claro que tiene responsabilidad directa Enrique Peña Nieto, se equivoca mucho quien acaso llegue a pensar lo contrario: es sencillamente imposible que un presidente no haya podido asegurar la incorruptibilidad de un sistema penal de alta seguridad al menos para retener a uno de sus presos, es inadmisible la idea, es, como dijo el mismo Peña, imperdonable.

Y es en efecto imperdonable porque nos habla justamente del involucramiento de todo el orden institucional en esta farsa, en este fiasco. No es posible pensar en el cuento de un “escape” como algo real, el elaborado intento del mediatismo oficial de contar el cuento de la “fuga de prisión” como algo salido de una película de Hollywood, con datos contradictorios y hasta ridículos constituye un grandísimo insulto para la inteligencia de todas y cada una de las personas mexicanas.

Es imperdonable porque no es que se pida un sistema institucional perfecto, como a duras penas atinan a señalar en la desesperación los pocos defensores de la ya de por sí muy dañada y poco legitimada figura presidencial, lo que se espera, como mínimo, es el básico funcionamiento del mismo sistema, y este escándalo que se ha convertido en ridículo nos demuestra que desgraciadamente no hay control sobre el mismo, y por lo tanto no puede haber confianza en el mismo.

Y mientras tanto de nuevo Peña nieto y su amplia y exagerada familia y comitiva están en Francia gastando centenas de miles de pesos al día. Error tras error, desde Ayotzinapa que la cara errática del gobierno no deja de mostrarse a cada momento, no ha existido un solo acierto, todo lo que vemos diaramente son casos de corrupción, impunidad, desfachatez en el gasto del erario, desconexión, autoritarismo, imposiciones reformistas de despojo y privatización.

Pena nieto es un presidente de figura tan deslegitimizada e impopular que no es ilógico que cuando una crisis así se presenta él no quiera regresar a atenderla, y es que no es un líder, es un títere, no es un comandante, es un conducto de intereres privados y extranjeros. No tiene el necesario apoyo ni popular ni institucional para hacer otra cosa más que mandar un mensaje en video con palabras ya preparadas por alguien más.

Y es que además no es por ofender, pero ya cuando era gobernador no pudo encontrar a una niña llamada Paulette, y ahora quiere venir a pretender que, uno, nos creemos que la fuga fue gracias a sus “cómplices”, palabra que es un eufemismo para decir “autoridades, instituciones, y medios que colaboraron y colaboran”, y dos, que es posible encontrarle y represarlo; y es que sencillamente nadie encuentra lo que no quiere encontrar, ya vimos que coincidentemente detuvieron en el estado de México, de dónde Peña fuera precisamente el gobernador incapaz de encontrar a la niña, a un periodista que estaba investigando la fuga del capo.

Y es por esto que Peña Nieto debe renunciar, porque no es sólo que el pez muera por su boca y con justa razón se le recuerde lo que dijo en 2014 a Krause, no es que sea este un linchamiento irracional, es más una necesidad política para un Estado en crisis, es algo que incluso sus patrones bancarios y capos deben de estar ya comprendiendo: cambiar de rostro político se hace necesario ante esta crisis de imagen pública al interior y al exterior del país.

Es necesario porque su figura está muy deslegitimada, porque el tejido social ya está de facto acercándose a otras figuras como, curiosamente, ¡la de mismo chapo!: el culto que le hacen en su propia tierra, tiene el mismo origen cancerígeno que empezamos a ver en las redes sociales dónde muchas personas a través de memes y tweets, a veces de broma, a veces no tanto, claman por la ayuda del chapo ahora libre para que ajusticie a personajes como Donald Trump y, oh sorpresa, el mismo Peña Nieto.

El mismo Peña Nieto debe ver que para mantener una mínima estabilidad y cohesión social, él debe presentar de manera solemne, respetuosa y resignada su renuncia, y abrir paso a otra administración menos odiada. Si esto pasa, en la población debemos tener en claro que no sería democracia, que en México no la hay, pero al menos podremos tener un respiro de tener que soportar una figura impuesta para los planes de otros, figura que junto con su familia se burlaban de toda la población constantemente con sus casos de corrupción y despilfarro.