lunes, 11 de mayo de 2015

O será el exterminio d la población infantil

¡¡Exijamos lo Imposible!!
Por Esto!

¿Defunciones fortuitas por vacunación?
Gilberto Balam Pereira

La ciudad

Fortuitas al momento de los hechos (defunciones inesperadas e inexplicables) pero que obligadamente deben ser investigadas por la magnitud de su importancia. No se trata de uno o dos casos, sino de un universo de niños mexicanos expuestos al error, descuido o negligencia técnica.
Decíamos hace unos días en esta Sección que el mecanismo defensor de las vacunas consiste en el uso de agentes patógenos atenuados en el laboratorio, que se introducen a los organismos vulnerables, teniéndose así la respuesta de éstos, los cuales de inmediato comienzan a producir las defensas inmunológicas o antígenos específicos y necesarios

Estos nuevos productos aplicados a los organismos susceptibles, son proteínas, que por su origen externo encierran posibilidades alergénicas en los individuos recientemente vacunados

Por tal razón, de ninguna manera el inmunizador puede ejercer su acción inconsciente y mecánicamente, ni fortuitamente (sin prevención ni premeditación), vamos, ni inopinadamente
como un robot
sin responsabilidad. ¿Qué otras palabras hay que señalar para que se entienda los riesgos que encierra este tipo de campañas? ¿Dónde está la culpabilidad compartida de epidemiólogos, jefes de distritos sanitarios, jefes de salud estatal, supervisores, etc.?

Por ahora sólo estamos enterados del caso al azar de
Chiapas, pudiéndose tratar de otro estado cualquiera, donde el nivel y frecuencia de la desnutrición infantil es elevado y progresivo, dadas las condiciones miserables de la población marginada.

Ante esta situación generalizada, podemos asegurar que un gran número de niños de edad preescolar se encuentran en un elevado estado crítico en su capacidad de producción de anticuerpos contra un elevado número también de enfermedades infecciosas

De allí que se tengan referencias sólo aproximadas sobre la mortalidad infantil, sus causas y su distribución geográfica.

Cada día los mexicanos creemos menos en la información que comunican a la opinión pública las instancias gubernamentales. Cualquier consultante, por ejemplo, abriga muchas dudas e interrogantes sobre los informes del Inegi

Veremos con qué cuentos nos salen ahora las dependencias relacionadas con la salud pública del país.
Aparte del crítico estado nutricional de la infancia, tenemos el factor climático, que en este año la temperatura ambiental está alcanzando alzas insospechadas. Y cualquier ciudadano está enterado de que los productos biológicos como las vacunas requieren de una constante baja temperatura próxima a cero grados centígrados

Nos preguntamos si en las poblaciones apartadas se dispone de la seguridad de temperatura que proteja las vacunas, necesariamente para conservar su eficiencia inmunológica.

Permítanme mis estimados una brevísima digresión. En mi condición de epidemiólogo de los servicios médicos del Estado, allá por los años 60s recuerdo que previendo cualquier emergencia, transportábamos hasta los pueblos más lejanos el material biológico en termos apropiados en tamaño y material que nos aseguraran el mantenimiento de la temperatura requerida

Otro factor preventivo que tomábamos en cuenta en la vacunación era la disponibilidad de productos antialergénicos del tipo de la Avapena comúnmente bien tolerada por los pacientes, en particular los pediátricos. Me pregunto ¿los inmunizadores de Chiapas habrán considerado tales medidas preventivas tan indispensables en las campañas sanitarias? Y nos absteníamos de vacunar a niños que presentaban cuadros respiratorios

Hasta ahora se ha comunicado la existencia de 36 niños involucrados en los daños colaterales de la vacunación en Chiapas, con dos fallecimientos. Es importante investigar también las condiciones de seguridad biológica del material desde su origen, y si se trata o no de alguna cepa de virus incorrectamente preparado para su uso. De enorme gravedad sería que las cepas de virus que se están empleando sean en general de mala calidad biológica

Un lector me comentó: “pobre México, al perro más flaco es al que le da sarna”. compa, pero es que los problemas sociales digono son parciales ni unilaterales, el caso que hoy nos ocupa no es un fenómeno aislado ni fortuito. Se inscribe en un contexto de irresponsabilidad y negligencia de un Estado en general corrupto en su máxima expresión.

No hay comentarios: