La Jornada
Los capacitadores convencen sólo a 10% de los insaculados para esta responsabilidad
Elevado rechazo de capitalinos a ser funcionarios de casillas
El consejero González Martínez indica que la negativa ocurre de forma más recurrente en gente de colonias de altos ingresos
Viajes, desconfianza en el proceso y los conflictos, entre los argumentos
Raúl Llanos Samaniego
Durante una entrevista tras presentar una guía para evitar la discriminación en los comicios, destacó que esa situación se enfrenta más entre la gente que vive en colonias de ingresos altos, donde no sólo se da la negativa, sino incluso se dificulta notificar a las personas que fueron seleccionadas para tal responsabilidad.
Resaltó que entre los argumentos que exponen los capitalinos para no participar en una mesa receptora del voto están la alta desconfianza hacia los procesos electivos, los conflictos que han escenificado los partidos políticos, cuestiones religiosas, de salud, que van a viajar en esa fecha o bien hay quienes simple y sencillamente no quieren. No obstante, remarcó que ese rechazo fuerte no pone en riesgo el proceso electivo que se realizará en la capital.
Carlos Ángel González detalló que la noche del pasado martes consejeros del IEDF sostuvieron una reunión de trabajo con funcionarios del Instituto Nacional Electoral (INE), en la cual se analizó este asunto, toda vez que al organismo le corresponde la facultad de insacular y capacitar a los capitalinos que fungirán como funcionarios de casilla.
Ahí se detalló que la ciudad de México va en el lugar 31, somos el segundo peor lugar de la capacitación en el país, porque tenemos uno de los mayores índices de rechazo a ser funcionarios de casilla, y que podría tener uno de sus orígenes en la gran desconfianza a los procesos políticos
Precisó que un ejército de 2 mil 500 capacitadores asistentes electorales (CAE) recorren las calles de esta ciudad para notificar, cada uno, a 300 personas que fueron seleccionados para ser funcionarios de casilla y que deben ser capacitados para esa tarea, pero han logrado convencer a 30, en promedio; es decir, sólo 10 por ciento.
–¿Qué función deben cumplir esas personas en las casillas?
–Instalar las mesas receptoras de voto, armar las mamparas, las urnas, recibir a los ciudadanos, identificarlos con su credencial de elector, darles sus boletas, identificarlos en la lista nominal y una vez que votan, marcarles el dedo y marcar la credencial.
–¿Por qué el rechazo?
–Las causas varían. Hay como seis o siete que han reportado los CAE, una de ellas es que el insaculado se encontrará fuera del país; hay quienes aducen, incluso, cuestiones religiosas, de salud y hay quien simple y sencillamente lo rechaza, que en este caso son más de 24 por ciento de quienes no aceptan participar, digamos que la cuarta parte.
González Martínez llamó a los partidos a que formulen campañas con propuestas que incentiven y alienten la participación.
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