Narco-guerra
Lilia ArellanoEstado de los ESTADOS
Crece la inseguridad en Estados
Imperan impunidad y corrupción
Violencia aterroriza a ciudadanos
Economía crecerá menos: expertos
Foro Económico en Quintana Roo
“No combatas la corrupción. Adminístrala”.- Jorge Saldaña
Los acontecimientos de los últimos días llevan al cuestionamiento: ¿en qué momento nos convertimos en un país donde reinan la corrupción y el cinismo? Habría que analizar muy a fondo cuándo se comenzó a dar este fenómeno que se ha convertido en la gran amenaza nacional, en el generador de fortunas incalculables, pero también de una pobreza insultante y de entregas al mejor postor del patrimonio que por generaciones debiera conservarse para beneficio de quienes habitamos estas tierras. Un recorrido por el viaducto Miguel Alemán hasta llegar a la glorieta conocida como “de Petróleos”, es el mejor ejemplo que nos viene a la mente por una y mil razones.
Hasta ahora y desde su construcción, tal obra no ha sufrido un sólo derrumbe y eso que hace ya más de 50 años y que no existían todos esos adelantos con los que cuentan los encargados de estas vialidades. No son para nada frecuentes los cierres de este paso vehicular por la necesidad de repavimentarlo, tampoco se ha derrumbado ninguno de los pasos a desnivel, ni se ha afectado la red de drenaje de aguas negras, como tampoco la de agua potable o lo que antes era potable. O sea que no había entonces la entrega de porcentajes para la realización de estas obras que cayeran en manos de quienes, sin escrúpulos, exigían más y más sin importar la calidad de los materiales con los que tales proyectos se realizarían.
Ni qué decir del periférico Adolfo López Mateos, tampoco ha sufrido las averías que registran, por ejemplo, los segundos pisos, los flamantes gigantes que se inundan en cada lluvia. El choque de trenes en la línea del Metro es otro claro ejemplo de los momentos en los que los funcionarios se hundieron en la corrupción y comenzaron a desatarse ambiciones sin límite. La primera línea, la construida en los tiempos de Díaz Ordaz, la que recorría la avenida Ignacio Zaragoza, atravesando la zona del aeropuerto y hasta llegar a lo que era una terminal camionera conocida como San Lázaro, no ha sufrido desde entonces las averías que han caracterizado a las obras de este transporte en los años recientes, estando la regencia y la jefatura de gobierno de la capital de la república bajo el mando de diferentes partidos.
Tan no se habían logrado incrustar las mafias de la droga hasta las entrañas del poder y de algunos sectores de la sociedad, entre los cuales se encuentran tanto los ligados a la iniciativa privada como los de instituciones bancarias y autoridades hacendarias, que deberían vigilar el manejo de la Bolsa de Valores, que las avenidas como Paseo de la Reforma y hasta la glorieta de Petróleos permanecían adornadas con amapolas, flor que llevó incluso a la composición de una canción que durante más de una década estuvo de moda. Hoy, es planta supuestamente prohibida pero que ha generado toda una fortuna anual y lo mismo ha cobrado cientos, miles de víctimas en Guerrero, en la Entidad que se caracteriza por la producción de esta especie y que genera ingresos por más de 39 mil millones de dólares anualmente.
¿Cómo fue que de un momento a otro o de un sexenio a otro se cayó en el extremo y se comenzó a fincar con fuertes raíces la corrupción, el cinismo, la impunidad? Algunos señalan a los tecnócratas, es decir a la llegada de quienes carecían de antecedentes de participación política y sólo habían desempeñado cargos dentro de la administración pública. De ser así, entonces todo comenzó con Luis Echeverría y su cofradía de jovencitos a los que pretendió politizar y con los que sólo logró abrir la brecha en la que hoy se hunde el país. Ni qué decir que con la llegada de José López Portillo todo creció en este ámbito y se llegó al nepotismo que si bien ya existía no era motivo de orgullo ni de presentación abierta y directa sin importar lo que la población opinara al respecto.
Llegó entonces hasta el descenso de la unión familiar. Se sabía que los matrimonios se conservaban por mera cuestión de protocolo, por una prohibición de divorcio que emitía la propia sociedad. Y en eso no importó que se supiera que la primera dama tenía manera de cobrar las afrentas sobre las infidelidades del Ejecutivo Federal actuando de igual manera, menos aún que se supiera de veneraciones a la madre y la existencia de un entorno donde el matriarcado estaba por encima de las decisiones políticas, de las responsabilidades para aquellos a los que sin tener enfrente ninguna oposición emitieron el voto.
No parece, entonces, que la llegada de Miguel de la Madrid representara un cambio en un camino que ya había sido iniciado y que se profundizó al admitirse con gran orgullo a quienes llevaron a cabo sus estudios universitarios en el extranjero y ahí se llenaron de suficiente material para apreciar las riquezas existentes en estas tierras y determinar el grado de estupidez que acompañaba a quienes, con la confianza puesta en las autoridades, se limitaban a acatar todas las determinaciones que el gobierno tomaba sin mayores protestas. Campo más que fértil para el enriquecimiento personal basado en la ambición de convertirse en sujetos de atracción en un mundo globalizado y llenó a multimillonarios por generaciones.
Al parecer, hemos olvidado que hubo un México en el que la corrupción actual era inexistente en las dimensiones que hoy registra. Traidores y vendedores de patria los hemos tenido a lo largo de toda la historia y con ellos se han llenado las páginas negras, pero también se han saturado pensamientos que han logrado borrarlos y no parece que los más viejos de cada familia se empeñen en hacer ver a las nuevas generaciones que cuando se conoce el pasado de cada pueblo se tienen también oportunidades de saber hacia dónde debe caminar el nuevo rumbo para no repetir los mismos errores. A no ser que estemos sufriendo el Síndrome de Estocolmo, no es posible explicar que se vuelvan a emitir votos por aquellos que nos han demostrado a cada paso dónde radican sus verdaderos intereses.
Y ahí está, más que demostrado, cómo la mafia ha ido apoderándose de municipios y domina en varias de las Entidades de la república. Cómo van ocupando el papel de la autoridad y ejercen sus propias leyes y de qué manera han trabajado las instituciones hacendarias, como las aduanas, donde ya se ve se permite la importación de armamento de alto poder. Lo que a continuación sigue, demuestra claramente este empoderamiento en el cual la sociedad sólo sigue pagando cuota de sangre por seguir ocupando estas tierras.
NARCO-IMPUNIDAD
La inseguridad es el principal problema del país actualmente, reconocen las autoridades. Este cinco de mayo, después de los ataques de narcos pertenecientes al “Cartel de Jalisco Nueva Generación” contra las fuerzas armadas en al menos cuatro entidades, en los que murieron 15 personas, entre ellos seis militares, el secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, admitió que México se ve acosado por circunstancias que no merece, por apátridas que han cometido acciones viles.
Ante el presidente Enrique Peña Nieto y durante la ceremonia de toma de protesta de bandera de los integrantes del Servicio Militar Nacional Clase 1996, el general hizo un llamado a la unidad nacional, a cerrar filas contra la delincuencia y dijo que México es una nación que no se vence ante la adversidad. Cienfuegos advirtió que las fuerzas armadas mantendrán su despliegue día y noche para combatir a las organizaciones delincuenciales donde se requiera con unidad y respeto a la ley.
Al conmemorar el 203 aniversario del rompimiento del sitio de Cuautla en 1812, el titular de la Sedena recordó que los líderes de los grupos criminales que han atentado contra el país, han sido detenidos, encarcelados o “neutralizados”, y ese es el destino que espera a quienes ofenden a los mexicanos y a las instituciones con sus acciones delictivas. También llamó a la población a denunciar a estas personas, a no permitir que se mezclen con los buenos mexicanos, así como a eliminar la corrupción, la impunidad y la ilegalidad.
Sin embargo, la ofensiva del Cártel Jalisco Nueva Generación en respuesta a los operativos militares en su contra exhibe la acentuación de la violencia y evidencia la falta de resultados reales en el incremento a la seguridad de la población en diversas zonas del territorio nacional. Es de destacar la capacidad de respuesta de este grupo delincuencial ante las fuerzas armadas, toda vez que abarcaron 25 municipios, lograron derribar una aeronave militar y hubo al menos seis militares muertos. Se confirmó que fueron dos impactos de proyectiles lanzados por un lanzacohetes RPG los que derribaron el helicóptero Cougar Mat 1009 de la Fuerza Aérea Mexicana el pasado viernes en el municipio de Villa Purificación, en Jalisco.
Pero ese no es el único cártel que ha puesto en jaque a las fuerzas armadas del país. Por ejemplo, en Nuevo León, la región norte que colinda con Tamaulipas, es territorio en el que impera la delincuencia organizada. El domingo pasado, 10 policías de la Fuerza Civil, fueron emboscados en el municipio de Vallecillo. Los grupos criminales, según los reportes policíacos, controlan municipios como éste, Parás, Anáhuac, Agualeguas y General Treviño, que tienen corredores a Nuevo Laredo, Nueva Ciudad Guerrero y Ciudad Mier, en Tamaulipas. En los últimos años se han registrado decenas de muertos y ataques, entre los que destaca la ejecución, en noviembre pasado, del general retirado Ricardo César Niño Villarreal, coordinador de Seguridad Pública en la zona norte de Tamaulipas, y de su esposa. Según las indagatorias preliminares, el ataque del pasado domingo se ocasionó porque policías incursionaron en un área dominada por un grupo ligado a Los Zetas.
Tamaulipas resiente la disputa entre sicarios del cártel del Golfo y células criminales de Los Zetas, lo que ha detonado asesinatos y balaceras en calles y avenidas de las principales urbes de esa entidad. En su disputa, han tomado puentes, calles, sitiado a las ciudades e incluso lanzado ataques con granada al Palacio Municipal de Matamoros. La violencia ha acelerado la migración de su población a otras entidades como Nuevo León.
En esa entidad se vive un estado de emergencia, a pesar de las declaraciones del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, en el sentido de que la violencia ha disminuido en la entidad. Según el gobierno de Enrique Peña Nieto, Los Zetas y el Cártel del Golfo son organizaciones que “fueron desmanteladas”, pero nuevamente la realidad los desmiente. El nivel de violencia registrado ha obligado al gobierno de Estados Unidos, a través de su Consulado General en Matamoros, a alertar a sus ciudadanos de no viajar o transitar por las calles de Tamaulipas.
El Gobierno de la República ha centrado su estrategia de combate al narcotráfico y al crimen organizado únicamente en la captura de los líderes de los cárteles, lo que ha generado más violencia, pues las huestes de los criminales aprehendidos emprenden una guerra contra aquellos que pretenden el mismo poder, o contra quienes ocupan, por acuerdos pasados, los territorios dominados. Los criminales pelean en balaceras y enfrentamientos con una estela de muerte, las estructuras criminales. A la estrategia oficial le ha faltado desmantelar no sólo la estructura de recursos humanos de los cárteles, sino desmantelar el recurso económico y físico a partir del aseguramiento de cuentas bancarias, negocios ilícitos, de lavado de dinero, de bienes y casas de seguridad.
El Estado de México también resiente una ola de violencia. En tan sólo ocho días, registró cerca de 100 homicidios dolosos, según cifras de la Procuraduría de Justicia del Estado de México (PGJEM). Del 1 de enero al primero de mayo de este año, la cifra de ese delito ascendió a 699, de acuerdo a reportes oficiales.
El titular de la PGJEM, Alejandro Gómez, dice que esos índices de homicidios derivan de la desarticulación de grupos dedicados a la venta de droga, principalmente en municipios del Valle de México. “Hemos logrado golpear a varios grupos delictivos en la zona del Valle de México, lo que ha ocasionado precisamente que otros grupos delictivos pretendan alinear a estos puntos de venta de drogas”, declaró el funcionario a un diario del Distrito Federal.
Al iniciar el año, también en Michoacán se registró un repunte de la violencia, con el incremento de los homicidios dolosos, secuestros y extorsión. De acuerdo con el informe de víctimas de homicidio, secuestro y extorsión de la SNPS, la entidad se mantiene en tercer lugar en estos rubros, sólo superada por los estados de México y Guanajuato.
Los enfrentamientos entre fuerzas del gobierno y grupos de autodefensas en Michoacán pusieron en duda la estrategia del comisionado federal nombrado hace un año y despedido del cargo. Líderes de cárteles fueron capturados o abatidos, lo que fue presumido como un éxito de dicha estrategia por parte del presidente Enrique Peña Nieto. Sin embargo, los enfrentamientos entre ex integrantes de grupos de autodefensa con fuerzas del gobierno, y otros grupos delincuenciales por el control del territorio que dominaban “Los Caballeros Templarios” incrementó el nivel de violencia en la entidad.
En Guerrero, la violencia ha contaminado los comicios. Ulises Fabián Quiroz, aspirante a la alcaldía de Chilapa, fue asesinado el pasado viernes, por un comando armado que lo emboscó en las inmediaciones del municipio al que aspiraba a gobernar. Además, en marzo pasado fue asesinada Aidé Nava González, quien era precandidata del PRD a la presidencia municipal de Ahuacotzingo; el 25 de abril, el candidato a gobernador de Guerrero por el Partido Movimiento Ciudadano, Luis Walton Aburto, denunció que al menos una veintena de hombres armados lo “encañonaron” en una de las avenidas principales de Chilapa; y la candidata a presidenta municipal de Atenango del Río, Leticia Vélez, recibió llamadas intimidatorias, solicitándole que dejara la contienda.
Los hechos violentos ocurridos en los últimos meses generan gran preocupación. La grave situación de violencia e inestabilidad política han generado opiniones a favor de la suspensión de los comicios, o el voto nulo como una forma de expresar su protesta.
En México impera la impunidad, debido a una débil y fracasada estrategia para combatir el crimen organizado, y debido en gran parte a la corrupción y a la colusión del Estado con los criminales.
CRECEREMOS MENOS
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