La virtud de POR ESTO! ...es con la VERDAD

¡¡Exijamos lo Imposible!!

La complicada apuesta a la mentira y sus graves consecuencias
María Teresa Jardí

Luis Téllez es un sujeto impresentable, salta a la vista. Pero contra quien --debido a un lío de faldas o quizá incluso a un chantaje disfrazado tras un lío de faldas--, a base de una grabación, condenable desde el punto de vista jurídico, se está cometiendo, al menos, un acto carente de ética, incluso tratándose de un error al colgar el teléfono. Lo ético era haber borrado de inmediato la grabación. Y entre la ausencia de la ética y la comisión de un delito hay un tan estrecho margen que ni el hilo dental lo detecta. Aumentado, además, el acto inicial de filtración de una grabación ilegal, por las otras filtraciones de grabaciones de conversaciones obtenidas de la misma manera ilegal. Esto no se tendría ni que obviar ni que olvidar.

Otra cosa es la filtración periodística y ahí sí estoy plenamente de acuerdo en que es un derecho el dar a conocer, el periodista, una vez que ha llegado a sus manos, lo que a la nación afecta. E incluso estoy convencida de que es una obligación de todo buen periodista, cada vez que se le presente la ocasión, el dar a conocer la falta de principios de quienes se ostentan como servidores públicos. Ese es uno de los grandes méritos del POR ESTO!

Pero, desde el punto de vista jurídico, en un Estado de Derecho, que hoy no vivimos en México pero en el que millones aspiramos a vivir algún día, deber ser investigado como un grave delito el de grabar ilegalmente cuestiones inherentes exclusivamente a la vida privada de las personas incluso tratándose de conversaciones que puedan implicar delitos cometidos por otros. Nada tan grave para una sociedad como el que se permita que se “legalice” en los hechos, como se ha aceptado en México, la escucha de las conversaciones que en privado tenemos las personas. Por eso, incluso, para el combate al terrorismo, el derecho internacional señala los límites a las escuchas permitidas. Y la investigación y posterior acusación y castigo debe hacerse en esa vertiente de una vez por todas. Claro, como no tenemos Corte de Justicia, por ahora no se hará. Pero debe quedar claro, para los ciudadanos, de cara al nuevo Constituyente que el país demanda, que esa es una asignatura pendiente, la que de no aprobarse impedirá la construcción de una vida digna, respetuosa y civilizada en México.

Ahora bien, quedando claro que es ilegal, desde el punto de vista jurídico el asunto, inmoral e ilegítimo, desde el punto de vista político, el asunto tiene implicaciones terribles para Calderón.

Las conversaciones grabadas a Téllez exhiben al funcionario como un sujeto desleal con antiguos amos y con nuevos empleadores.

Y como tanta confianza le tenía el usurpador, nacida, presumiblemente, de su deslealtad a sus anteriores amos. Le dejó, o peor aún le ordenó, que se convirtiera en el vocero que, por competencia, debió ser la PGR.

Lo de la competencia de las instituciones tampoco es una chorrada inventada al vapor. Es producto de la reflexión histórica que ha ido permitiendo la vida civilizada entre gobernantes y gobiernos.

Y para Calderón el costo de haberlo usado como vocero para que al público contara las mentiras que se dirían con relación al frívolo suicidio, con quién sabe cuántos asesinados de paso, del que se siente el favorito de la corte del faraón, a pesar de no llegar ni a Presidente Legítimo, Felipe Calderón, salta a la vista que es y será altísimo. Hoy empieza apenas a pasarle una factura más, de las muchas en su haber, que lo han convertido en el peor desgobernante posible, jamás soñado ni en la peor de todas nuestras pesadillas juntas.

En manos de Téllez ha quedado el usurpador. Si lo corre se sabrá, de inmediato de cierto y con pelos y señales, lo ocurrido con Mouriño. Y si lo conserva, amén de exhibir que le tiene miedo, igual al acabar el sexenio contará la historia que Calderón no quiere que se sepa.

Desde el punto de vista político Téllez es una piedra atada al cuello del usurpador que lo va a arrastrar, en cualquiera de las vertientes que elija para parar el nuevo escándalo, al despeñadero donde se acumula la, mucha ya en nuestro caso, basura política.

Calderón está en las manos de Téllez y tanto si lo conserva como si lo quita el grave error lo convirtió en cordero destinado a ser esquilado. Problema aparejado que trae el querer convertir la mentira en la verdad que no existe.

Tontería de graves consecuencias cuando salta a la vista que la verdad acaba más tarde que temprano siempre por saberse y las más de las veces tratándose de cuestiones políticas por hacerse pública. Esa es la virtud del POR ESTO! su apuesta siempre a la Verdad por más cruenta que sea.