Contralínea
Calderón se descolgó de su Hard-Bar para más brindis
Álvaro Cepeda Neri * El dividido panismo sigue entretenido en destruir lo que resta del Partido Acción Nacional (PAN), en el contexto de la disputa electoral en 14 entidades. Por esas escisiones, todo indica que en la competencia por la gubernatura de Baja California –feudo de los Hank González– el Partido Revolucionario Institucional (PRI) volverá a tener el cargo retenido por los blanquiazules desde la década de 1980, cuando al salinismo le saltó la liebre en ese estado. En ese ambiente, Calderón va y viene de su asilo, tanto a nuestro país como al resto del mundo, ya que nada tiene que hacer; pues en la universidad estadunidense sólo le rentaron un cubículo por las millonarias donaciones que hizo durante los 6 años que de su mal gobierno.
Allá por mediados de junio se dejó venir y telefoneó a sus antiguos empleados para invitarlos a echarse una copa y tratar de conspirar contra el presidente del PAN, nieto de Francisco I Madero, que anda mentando madres contra el PRI porque oye pasos en la azotea electoral. A veces ebrio y otras con resaca, estuvo atizando el conflicto entre corderistas y maderistas en el Senado, donde ha salido a la luz pública que ambos bandos legislativos se han repartido el botín de 200 millones de pesos. Calderón busca reposicionarse en su partido para nombrar nuevo presidente y comité (quisiera que fuera su todavía esposa Margarita Zavala quien anda muy activa apoyando a sus compañeros panistas). Y mueve los hilos con sus incondicionales, mientras Molinar Horcasitas y Karam, los dos implicados en el incendio de la guardería sonorense, padecen alguna enfermedad (dicen que cáncer). Mientras el hermano de Margarita es acusado de embolsarse no menos de 400 mil pesos como “asesor” de Cordero, que luego resultó un “préstamo”. En suma, pura corrupción, como fue el calderonismo.
El ya fallecido ideólogo del PAN,
Carlos Castillo, le espetó en su cara a Calderón que no fuera a perder
el partido y el poder, lo que sucedió; y entre sus enormes defectos el
de controlar todo al estilo de un capo (¿como Pablo Escobar, el narco
colombiano, despiadado y homicida?). Calderón sigue al tanto del país a
través de sus corresponsales y de dar indicaciones para atacar a Peña,
al PRI y sobre todo a sus enemigos y adversarios dentro y fuera del PAN.
Va y viene, pues con la millonaria pensión los vuelos le salen
regalados.
Su penúltimo viaje, descolgado desde Hard-Bar,
que lo tiene como asilado, fue para seguir conspirando y ver la
posibilidad de imponer a su esposa en la presidencia de Acción Nacional y
con ella a su grupo. Distanciado el matrimonio, necesitaría la tal
Margarita hacer efectivo el divorcio, para que algo le creyeran, aunque
ella también está en la mira de la investigación del incendio de la
guardería, ya que le proporcionó protección a su prima hermana, dueña de
esa guardería donde murieron 49 niños. Así que por donde le busque
Calderón, el PAN sigue en el despeñadero y sólo tiene vida artificial
asido al PRI en el Pacto por México. Y si los panistas apoyan la
privatización de Pemex, recibirán como pago respiración boca a boca para sobrevivir, mientras Calderón, entre salud y salud, conspira.
*Periodista
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