Hasta videntes resultaron los legisladores

¡¡Exijamos lo Imposible!!
Remedio, lejano
Lilia Arellano

Estado de los ESTADOS

Hay que hacer otra reforma hacendaria: BM
Aprueban Ley de Ingresos con más parches
Cubren hueco: suben cotización del petróleo
Desempleo, más gasolinazos y mayor inflación
Cordera: hay que volver al mercado interno

“Es inútil toda polémica si no hay esperanza de que resulte provechosa” Juan Luis Vives
 

La sacudida con la reforma hacendaria se ha resentido en todos los rincones del país y ha puesto al gobierno en una tesitura mucho más delicada, al quedar exhibidas y documentadas las inconformidades de todos los sectores y presentarse, al unísono, la determinación de presentar amparos contra las nuevas disposiciones. El punto más delicado reside en que ni siquiera quienes la elaboraron y tampoco los que son señalados de manera directa, como los orquestadores y presentadores, han estado ciertos de las bondades o del perjuicio que causaron en sus redacciones y cabildeos. Tan es así, que el propio Agustín Carstens, gobernador del Banco de México, advierte que hay necesidad de hacer otra reforma en tanto prevalecen interrogantes sobre los realmente beneficiados, ya que los 120 mil millones que consiguieron los de la telebancada de “rebaja” giran en un rumbo totalmente opuesto a todo lo que hasta hoy se ha escuchado.

Se eliminan gravámenes que durante años fueron calificados por los contribuyentes de nocivos y se “fabrican” otros que, sin entrar en vigor, ya tienen por delante el presagio de mayor desempleo, de cierre de empresas, de incremento inflacionario y de permitirnos corroborar que sus amparos no tendrán ningún efecto que les resulte favorable, ya que aun cuando llegaran hasta la máxima tribuna, los magistrados estarán a favor de cualquier medida que les garantice que no habrán de verse disminuidos ninguno de sus fabulosos y cuantiosos ingresos.

Según el señor que sigue comiéndose media vaca porque no ha dejado de ganar miles y miles de pesos, no ha sido suficiente con lo hasta ahora autorizado, por lo tanto, lo más probable es que en este mandato se presente otra iniciativa que, obviamente, será también recaudatoria… pero para unos cuantos.

Los legisladores cayeron en situaciones de ignorancia absoluta, como la observada cuando decidieron que el salmón era un alimento de lujo y lo gravaron con un 16 por ciento, cuando es de los productos del mar más económicos y de consumo muy popular. Ahora resulta que los cigarrillos hechos a mano estarán exentos y nos tragamos toda la verborrea que soltaron cuando decidieron tasarlos con un porcentaje mayor porque resulta que el gobierno registraba un enorme gasto en salud producto del incremento de ciudadanos padeciendo enfermedades bronquiales y pulmonares, a consecuencia del consumo de tabaco. Pero, los hechos a mano ¡son los más caros! Son los que se fuman quienes tienen abultada cuenta bancaria y es ahí donde quedan totalmente exhibidos porque esta fabricación ni siquiera genera un importante número de empleos.

Los parches no se han hecho esperar en esta Ley de Ingresos que, sin temor a equivocarnos, es no sólo de las más lesivas que se han dictado sino la peor hecha. Acordando a su manera, con cálculos que demuestran que el papel lo aguanta todo, ajustaron desde los precios del petróleo, elevándolos como les referimos en líneas anteriores de 81 a 86 dólares, sino que ya también son videntes y con el desliz permanente del peso y el abierto y libre control cambiario, también dejaron asentada cuál será la paridad precio dólar, sin que ello sirva de contención a los que seguirán siendo mensuales y todo indica que permanentes, aumentos a la gasolina. Estimaron que con sus “adecuaciones” se redujo en 9 mil 705 millones de pesos la propuesta inicial que planteaba la recaudación de 4 billones 470 mil millones de pesos.

Y, si en estricto nos remitimos a los números, resulta que a las televisoras se les ha permitido, mediante una modificación propuesta por el Partido Verde, dejar de pagar 120 mil millones de pesos por concepto de pago de aprovechamiento por la banda de 2.5 gigahercios. Los ajustes se hicieron por regiones, en una se hizo la reducción de 5 mil 971 pesos por unidad a 2 mil 606; en la que comprende el Estado de México y el DF, donde consideraron cobrar 8 mil 685 pesos, los legisladores siempre atentos a las cámaras decidieron que nada más sean 3 mil 700 pesos. Algunos consideran que todavía puede echarse para abajo tal medida que se sabe ha estado profundamente cabildeada con Luis Videgaray.

Solamente con este punto, queda demostrado que las aplicaciones rigurosas son para otros sectores. Nada se hizo por analizar, por lo menos, que el impacto en las zonas fronterizas fuera gradual y no el aumento de golpe que tendrá que liquidarse cuando la inflación se presente en escala mayor, sin incrementos salariales, con contrataciones de sobrevivencia, es, a decir de los expertos, “la reforma que deja más desprotegidos a los más desprotegidos”.

MAS LEÑA AL FUEGO

Los legisladores están ciertos de que cuentan con una muy mala fama, que son rechazado y criticados, que durante el tiempo que permanecen en las curules son permanentemente calificados y no precisamente con lenguaje adulador sino todo lo contrario y, sin embargo, poco o nada hacen por escuchar demandas y encausar sus votos hacia las medidas que realmente beneficien a las mayorías, sin que esto signifique continuar con actitudes paternalistas sino, simplemente, con la aplicación del sentido del equilibrio, de la justicia, del común. Así, todo parece indicar que inútil fue el amplio gasto de energía de diversos sectores para que al final se aprobara una defectuosa reforma hacendaria, con modificaciones que no dejan satisfecho a nadie y sí provocan severas advertencias sobre las consecuencias de las modificaciones a la Ley del Impuesto al Valor Agregado, Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios y Ley Federal de Derechos, así como la nueva Ley del Impuesto sobre la Renta, que incluyen la aplicación de nuevos gravámenes, que afectarán a las personas con menos ingresos y que van en contra de generar más incentivos a la inversión y creación de empleos.

Es una reforma “tóxica”, acusa el dirigente nacional del PAN, Gustavo Madero, por lo que se necesitará otra reforma, sentencia Agustín Carstens, gobernador del Banco de México, en un entorno nacional en el que el desempleo sigue elevándose. La reforma hacendaria que aprueban es un reflejo de la desigualdad que prevalece en el país, pues recarga la tributación fiscal en los trabajadores y consumidores y, al mismo tiempo, elimina el Impuesto Especial Sobre Productos y Servicios a los puros y otros tabacos hechos a mano, y el pretendido orden aduanero no ha resultado sino la apertura de puertas para el ingreso de mercancías que no sólo dañan a la moribunda industria nacional, sino que cercan y ubican a los millonarios de este sexenio.

Carstens destacó que el gobierno de Peña Nieto proyectaba, con la reforma hacendaria, elevar la recaudación de 2014 en 1.4 % del Producto Interno Bruto (PIB), pero con los cambios los ingresos adicionales serán sólo del 1 por ciento. A su vez, el dirigente nacional del PAN, Gustavo Madero, sostuvo que la reforma fiscal contiene elementos tóxicos que perjudicarán a la ciudadanía, por lo que, recalcó, el PAN trabajará en el Senado de la República para buscar las modificaciones pertinentes, no obstante que en la Cámara baja los legisladores panistas lograron en comisiones parte de la “toxicidad” a la reforma, al presionar para la desaparición del IVA en colegiaturas e hipotecas y rentas, entre otros.

Especialistas en temas fiscales y financieros consideran que, en términos generales, los condiciones en que se aprobó en la Cámara baja la reforma hacendaria va contra la tendencia mundial de generar más incentivos a la inversión y la creación de empleo. El conjunto de las medidas señaladas añade carga fiscal a personas de menor ingreso. Juan José Arcos, socio del despacho Garrido y Licona, sostiene que “esta reforma deja más desprotegidos a los más desprotegidos”. El especialista en temas fiscales y contables criticó que se limite la deducibilidad de las prestaciones que una empresa otorga a sus trabajadores. Ahora, esas prestaciones están exentas para el trabajador en 41 por ciento de su monto. Así las cosas, los patrones tienen que tomar la decisión de quién absorbe ese costo, con lo que o la empresa resiente un incremento en el pago de impuesto sobre la renta (ISR) o el patrón lo traslada al trabajador. Esa modificación afecta más a los de menores ingresos, que son, supuestamente, a los que no se quería afectar con la reforma.

Otra prestación que dan las empresas a los trabajadores, es pagar el IMSS que el trabajador debe aportar. Como ya no será deducible del Impuesto Sobre la Renta, el patrón puede optar por ya no pagar esa cuota, lo que puede afectar el ingreso de los trabajadores. Otro aspecto a destacar es el hecho de que en el dictamen aprobado por los legisladores, se duplicó el monto de deducciones que una persona puede hacer en su declaración del ISR. El montó se elevó de 47mil 200 pesos a 94 mil 550 pesos. La pregunta es ¿a quién se beneficia? A las personas de buen ingreso se les permite una mayor deducción, pero no a otros.

DESEMPLEO, GASOLINAZOS E INFLACIÓN

El negativo panorama económico que resiente el país, con una franca desaceleración en los limites de la recesión, habrá de empeorarse el próximo año con la nueva reforma hacendaria. Aún no se cumple un año del gobierno de Enrique Peña Nieto y en un reflejo de la caída en el ritmo de actividad económica, la tasa de desocupación llegó en septiembre a su nivel más alto en siete meses y la condición de desempleo afectó, en su mayor proporción, a las personas con nivel de instrucción superior que a aquellos que no completaron la secundaria. Por lo que toca a la inflación, se prevé que los impuestos aprobados el jueves por los diputados tenderán a aumentar la inflación en 0.45 puntos, según el grupo financiero Santander. Y para completar el cuadro, hay que resaltar que los “gasolinazos” seguirán por lo menos durante todo el 2014.
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