¡¡Exijamos lo Imposible!! Por Esto!
Prohibido comer maíz
Manú Dornbierer
Satiricosas
Como se informó en este espacio el pasado sábado 19 de octubre, después de la Marcha Mundial contra Monsanto:
“El Juzgado décimo segundo de distrito en materia civil del DF, del Poder Judicial de la Federación, ordenó la suspensión de otorgamiento de permisos, y liberación, experimental piloto y comercial de organismos genéticamente modificados de maíz”.
Esta orden judicial implica que las autoridades federales, las Secretarías SAGARPA (Agricultura) y SEMARNAT (Medio Ambiente y Recursos Naturales), facultadas para otorgar los permisos de comercialización en México -en este caso de la semilla de maíz transgénico- no pueden autorizar ningún permiso de liberación. Implica por igual a las empresas que realizan los trámites administrativos ante ellas. Es este el positivo resultado de una demanda colectiva CIUDADANA. Hay muchas organizaciones que la sustentan, entre ellas “Científicos Comprometidos con la Sociedad”, representado por Antonio Turrent, Semillas para la Vida, Guerreros Verdes y muchas más, aunque un grupo de personalidades firmó la demanda de tan buen éxito.
Los mexicanos conscientes hemos estado sudando frío por la posibilidad, ya avanzada, de perder ni más ni menos que la base de la civilización mesoamericana y de la alimentación actual de cientos de millones de personas, EL MAIZ NATIVO. Muchos extranjeros -y mexicanos- no saben ni entienden que México es el país de origen del MAIZ.
El titular de ese Juzgado es Guillermo Campos Osorio desde 1999 y fue ratificado en 2005 recibiendo un reconocimiento del Poder Judicial de la Federación por sus 30 años de servicio. Entre sus numerosas actividades ha participado en foros internacionales concursales del Banco Mundial en San Diego, California, en Washington D.C., en Río de Janeiro, Brasil, y en Buenos Aires, Argentina.
Reacciones
La gloria de la decisión del Juzgado en cuestión ha recaído también sobre los mexicanos en general que estamos encantados de tener jueces que no se venden. Pero ha sido fuera del país en donde mayor admiración causó la prohibición del maíz transgénico en el país del maíz.
Hay que leer por ejemplo a Beth Buczynski, “Care2”, de cuyo escrito extraigo y traduzco el primero y el último párrafo de su entusiasta artículo:
“Mexico Bans GMO Corn, Effective Immediately”: México prohibe el maíz transgénico. Efecto inmediato”.
“October 16, 2013 “Just when you think there’s no winning against the biotech industry, news out of Mexico City shows that all is not lost. After years of deliberation, a Mexico judge has placed an indefinite ban on genetically-engineered corn. Effective immediately, companies like Monsanto and DuPont/Pioneer will no longer be allowed to plant or sell their corn within the country’s borders”.
Justo cuando pensabas que no se podía vencer a la industria biotécnica, noticias de la Ciudad de México muestran que no todo está perdido. Después de años de deliberación un juez de México prohíbe por tiempo indefinido el maíz transgénico. Con efecto inmediato. A compañías como Monsanto, SuPOnt/Pioneer, no les está permitido plantar o vender maíz dentro de las fronteras de México.
“This is a huge victory for the Mexican people, and provides at least temporary protection for the 20,000 varieties of corn grown in Mexico and Central America. The decision comes just days after thousands of people in over 50 countries participated in the global March Against Monsanto.
Esta es una enorme victoria del pueblo de México, y proporciona por lo menos una temporal protección a las 20,000 variedades de maíz que se cultivan en México y Centromérica. La decisión llega justo días después de que miles de personas en más de 50 países participaron en la Marcha Global contra Monsanto.
Pero qué diferencia con los mexicanos entreguistas: Se ha oído a funcionarios de la Sagarpa, explicar: “Esto es momentáneo. De que entran los transgénicos… entran. Money, money, money… En la prensa nacional hubo repercusiones a favor de Monsanto: Alguno ignorante consideró como “tiro de gracia” al campo mexicano no abrirse al maíz transgénico. Pero más ridículo e ignaro aún es el que se burla: “… mas si osare un maíz enemigo”.
Iowa
Del estado campeón del maíz transgénico para fabricar ETANOL, producción que cuesta más energía de la que produce, llega esta información:
“Hay prohibición en ese estado de tomar elotes sin permiso y utilizarlos para el consumo humano, ya que no es alimento sino COMBUSTIBLE. El que robe maíz se ira derecho a la cárcel. En el 2012 se incendiaron las cosechas. De ahí sale el etanol del cual, ese estado es el mayor productor del país. Además ellos sí saben que el maíz no es para consumo humano. En todos los campos agrícolas de elotes hay letreros grandes prohibiendo su uso comestible. Amenazan con la cárcel a quien encuentren robando una mazorca”.
Antes el maíz producido en USA era comida de animales. Lo despreciaban. Luego nos lo vendían. Y ahora lo invierten en “energía”. Sin embargo, también lo usan para sus engordativas y muy caras cajas de colores de “Cereales”, así en abstracto, que tanto han contribuido a la obesidad mundial.
En la capital Des Moines, Iowa, decíamos el otro día, le dieron a un funcionario de Monsanto el Premio Nobel Alternativo “de la alimentación”. Vale la pena reescribir lo dicho: La World Food Prize Foundation, con un edificio muy apantallante que aparece en internet iluminado y visitable como un “capitolio”, le otorgaron en plena GUERRA MUNDIAL CONTRA MONSANTO, el 19 de junio de 2013, el Premio Mundial de la Alimentación 2013” a su funcionario Robb Fraley. ¿Qué maíz sirve en Iowa? Ojo, importadores del mundo, no compren nada ahí.
¿Qué pasa con el corn?
México debería, de efecto inmediato, detener sus compras de maíz made in USA. Vaya usted a saber qué tiene para ser tan detestado hasta por los nutriólogos del país vecino.
En su libro “El metabolismo acelerado”, la nutrióloga Haylie Pomroy desaconseja totalmente comer maíz en Estados Unidos, porque no sólo engorda sino enferma. Se refiere, claro al maíz de su país. “Los agricultores, al igual que el trigo, han modificado el maíz genéticamente de forma que dé más ganancia y ahora produce grasa. Si quieres engordar un caballo dale maíz”
Desgraciadamente, en el extranjero no conocen el verdadero maíz mexicano, porque las tortillas que se exportan en altísimas cantidades, las que se venden en todos los supermercados allá y aquí son de marcas industriales, Maseca, por ejemplo, que tan tontamente le declaró la guerra al maravilloso sistema del nixtamal.
La misma marca descaradamente niega ser nixtamal. En su publicidad, anterior a los conocimientos actuales, eso sí, decía:
“La producción de tortillas de maíz a partir de harina, en lugar de la producción tradicional a partir de masa nixtamalizada, significó un salto tecnológico de 5,000 años: pasar de la antiquísima preparación artesanal en ollas y fogones, a las plantas almacenadoras, procesadores y empaquetadoras del producto final a nivel industrial”.
Posteriormente, cuando se dieron cuenta del valor nutritivo del sistema autóctono, el nixtamal, a veces ponen en sus productos “nixtamalizado”. Pero ningún mexicano que sepa comer realmente compra esas marcas de tortillas y tostadas industriales, previstas para que sus dueños ganen millones atiborrando al mundo con harinas dudosas. ¿Por qué los “pobladores originales” tienen tan maravillosas dentaduras y cabelleras? Pues precisamente por la cal del nixtamal.
El “salto tecnológico” se puede calcular en kilos. Ha llevado a los consumidores mexicanos y otros compradores en todos los mercados de ese producto tan, tan, tan moderno e industrial, a adquirir muchos kilos inútiles.
Hay que seguir con atención lo que sucede con el destino de nuestro maíz, por más ocupados y distraídos que estemos con otros problemas y peligros. Lo primero es la alimentación. Hay que seguir el destino de este primer éxito judicial-ciudadano. Y hay que seguir y cuidar a los jueces mismos.
http://satiricosas.es.tl
T @manouscrita
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