Homozapping
Bótica 326: Elecciones 2015, Caso Aristegui, Miguel Herrera, Ley de Aguas, Monsiváis
Jorge Meléndez Preciado
En una fotografía de colección (Francisco Olvera), Enrique Peña Nieto ríe a mandíbula batiente con el ingeniero Carlos Slim en el Centro Libanés (La Jornada, 18 de junio). Eso no sería lo grave en un país que ve aumentar sus sufrimientos. Lo terrible es el diagnóstico del habitante de Los Pinos: las pasadas votaciones hicieron que el PRI, el PVEM y el Panal tengan mayoría en la Cámara de Diputados- en un momento la llamó Cámara Alta (Radio Educación, ídem), como si estuviéramos en EU-, debido a los avances en la economía, el incremento histórico en el nivel de empleos y el mayor consumo entre la población. Entonces, uno ya de plano no entiende nada. Veamos. Según Enrique, se han creado un millón trescientos mil empleo en lo que va de su encargo; cifra ridícula, ya que se necesitan, cuando menos, esa misma cantidad cada año, no cada tres; en efecto, si los compara, cual hizo, con los fracasados gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, el sale mejor librado, aunque ahora Vicentico que lo apoyó resulta un bueno para nada. El consumo, sabemos, está a la baja, tanto que ni siquiera los que poseen tarjetas de crédito las utilizan porque ya saturaron lo que tenían como límite, aunque en algunos sectores como la industria automotriz hay avances. Las inversiones son de empresas transnacionales, cerveceras y de automóviles, y se dio campos petroleros en la superficie, en Tabasco y Campeche, para que los magnates en ese campo vengan, ya que están reticentes a entrarle a un negocio en aguas profundas o gas lutitas por ser más caro que antes y por el temor a la inseguridad. El empleo, como siempre, aparentemente crece (según maquilladas cifras oficiales), pero en realidad lo que aumenta es la informalidad, que ya ronda el 60 por ciento del total; y la primera chamba para jóvenes, nuevamente, es un fracaso. Esto en lo económico. Respecto a las votaciones, Peña Nieto ya rompió con el PAN (sus ataques a los antecesores en el cargo es un mensaje obvio) y no quiere saber mucho del PRD, debido a su división (Pacto quebrado, aunque hay otro). Ahora se lanza en brazos del PVEM, al que apoyo al máximo a través del nefasto y emproblemado Eruviel Ávila, Manuel Velasco Coello (uno de los delfines de Enrique que se salvó de la quema), el INE y el TEPJF, más las televisoras. Y al Panal, que logró salir avante con muchas dificultades, le dará como regalo la libertad de Elba Esther Gordillo (¿y el combate a la corrupción?). Nueva mayoría que no tendrá mucho que presumir. Y en logros económicos de este sexenio (baja en electricidad, televisiones regaladas, no alza en la gasolina y un pequeño etcétera), todos fueron presumidos sin la figura presidencial que continúa siendo rechazada por el 60 por ciento de la población. Por cierto, el presidente del Centro Libanés, José Antonio Serio, dijo que necesitamos la ley, pero no de la selva, ya que actualmente no se puede transitar libremente por ningún lado. ¿Entonces?
Pequeña victoria
El quinto tribunal colegiado dictaminó que no se puede remover al juez, Fernando Silva García, quien lleva el caso de MVS y Carmen Aristegui. Aquel había dicho que debe resolverse con diálogo el asunto, pero además señaló enfáticamente que se debería cubrir los salarios de los reporteros cesados y desde luego el de Aristegui. Puso fecha para que concluyera el asunto y ella regresara al aire. Estamos, pues, ante una propuesta que plantea una salida honrosa, algo que no ha querido realizar la empresa, la cual, por cierto, cambia de estrategia como si fuera temporada de lluvias. Es un pasito el logrado, pero importa ya que eso dará nuevos ánimos a muchos que estamos luchado no sólo por el derecho de una compañera por hacer un trabajo profesional, digno, independiente, de fondo, sino justamente para que en todos lados se tome en cuenta al sujeto principal de los medios: el periodista. Y además, para que la información no manipulada sea el sello distintivo en esta hora, en la cual se requiere abrir los ojos ante una nueva embestida para entregar al país sin factura. Espacios de análisis y datos en los cuales pueda uno escuchar periodistas e investigadores sin consigna ni pagos adelantados son pocos. Es necesario, entonces, defenderlos.
Pequeño Piojo
Miguel Herrera, al que le gusta le digan El Piojo– aunque un amigo de la infancia dijo que era conocido antes como El Pulques– saque la conclusión-, se defiende acerca de sus tuits de apoyo al PVEM. Insiste que no recibió ningún pago por mandar opiniones sectarias, que es apartidista y que envió los mensajes debido a que simpatiza con un amigo (sic inquisitivo). Creámosle a quien luego del partido contra Brasil, en el cual la Decepción Nacional perdió 2 a 0- ¡por cierto, Colombia derrotó a la escuadra de Neymar!- justificó, como siempre, su humillación. Si este Piojo hace todo por sus cuates, estamos ante un irresponsable que se eligió para hacer funcionar a un equipo que no debe regirse ni por la amistad, ni por los deseos de los funcionarios (¿será que ya me estoy acelerando?), ni para representar los interese económicos de un pandilla de América. Por lo tanto, como dijera Ludwig Wittgenstein: “De lo que no se puede hablar, hay que callar”. Pero ya se sabe que la fama de Cuau y Piojos aparte muestran los desfiguros de aquellos que han elevado sin gas, sólo con espuma.
Dos
Momentáneamente, ya no se irá delante con la llamada Ley de Aguas, la que defendió con amor Manlio Fabio Beltrones; se nota que no obstante la mayoría del nuevo trío (PRI, PVEM y Panal, ya que fueron desplazados el PAN y el PRD luego que cumplieron su papelazo), no da para estas nuevas “reformas estructurales “ ni para “Mover a México”; ya será en otra ocasión; algo está cambiando rápidamente. Muy importante recordatorio nos hace el maestro Lorenzo Meyer en su artículo del 18 de junio (Reforma), acerca de la trascendencia del genio de Portales, Carlos Monsiváis, quien hace cinco años falleció dejando un enorme hueco en la comprensión de México; su ironía, memoria prodigiosa, encuentro constante con la realidad de las luchas sociales y formación de grupos para analizar los acontecimientos, de verdad, hace falta; Carlos (Snif).
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