miércoles, 22 de febrero de 2012

Muchas más chingaderas dirán de AMLO

¡¡Exijamos lo Imposible!! 
Escrutinio
Por Juan José Morales

Un golpeteo que dura ya seis años

Hace unos días escuché al conductor de un noticiario radiofónicoa quien conozco y sé muy bien que no habla precisamente como una recatada monjacomentar que López Obrador había usado la palabra “chingada”, esa misma que forma parte habitual del vocabulario de casi todos los mexicanos, a tal grado que ya es casi nuestro sello de identidad lingüística.

Lo comentaba, sin embargo, en tono de indignación y reproche, pretendiendo así descalificar a AMLO por usar lo que élel conductorcalificaba de lenguaje indigno de un candidato a la presidencia.

Desde luego, aquel arrebato de moralidad y decencia sólo me provocó risa. Pero refleja la forma en que algunos medios de comunicaciónla gran mayoría podríamos decirtratan de desprestigiar a López Obrador. Como no se puede acusarlo de ladrón, corrupto, inmoral, encubridor de latrocinios, de haberse enriquecido ilegítimamente, o de alguna de las muchas lindezas que adornan el currículum de la generalidad de los políticos mexicanos, se utiliza y magnifica escandalosamente cualquier pequeño e insignificante detalle para mantener el golpeteo iniciado hace ya más de seis años y que todavía continúa, con los mismos métodos y hasta con los mismos personajes.

Como se recordará, la guerra sucia contra López Obrador antes de las elecciones de 2006, fue obra de un publicista español de nombre Antonio Solá, contratado por el PAN. Esa campaña negra se basó en rumores alarmantes, como que en caso de triunfar AMLO, le confiscaría sus casas a quien tuviera más de una, que expropiaría las industrias y los medios de comunicación, y otras mentiras por el estilo, verdaderas ruedas de molino que sin embargo mucha gente se tragó y, atemorizada, las hizo votar por Calderón.

Pues bien, Solá, ese siniestro personaje, ya está de nuevo en México. Oficialmente, vino a trabajar para la candidata del PAN, Josefina Vázquez Mota. Pero sin duda también está aportando su granito de arenao su costal de engañosa la ofensiva contra AMLO, que ahora adquiere nuevos y muy diversos matices.

De él se dice que ya está cansado, que se siente derrotado desde ahora, que es un viejo, que es un loquito, que está amargado por su fracaso, que sus ideas son del siglo pasado, que se rodea de puros viejitos, que no toma en cuenta a los jóvenes, que está desesperado porque las encuestas no lo favorecen, que dice groserías y que se come las eses al hablar, que en los sondeos la que sube es la Vázquez Mota, etc.

Y vuelven las mismas advertencias truculentas de 2006: si gana, habrá devaluación. Si gana, tomará medidas populistas y arruinará al país. Si gana, habrá fuga de capitales y sobrevendrá una crisis económica peor que la actual. Si gana, los inversionistas extranjeros se asustarán, no invertirán en México y crecerá el desempleo. Si gana, dejarán de venir los turistas. Y así por el estilo.

Una vez más se echan a correr rumores en el sentido de que se apropiará de los ahorros de los trabajadores para financiar demenciales planes de obras públicas, o que habla mucho de crear empleos pero para ello se va a dedicar a emitir billetes y con ello disparará una inflación tan grave que la de tiempos del López Portillo y De la Madrid será cosa de niños.

En fin, las mismas historias de hace seis años. Sólo que ahora mucha gente ya está curada de espanto, incluso no pocos de aquellos empresarios que en ese entonces le creyeron al español Solá y contribuyeron a financiar su guerra sucia.

Comentarios: kixpachoch@yahoo.com.mx

No hay comentarios: