¡¡Exijamos lo Imposible!!
SIEDO interviene narco-mansión de Altabrisa
Nicaragua confirma: son 2 expedientes, uno por los 18 mexicanos
detenidos y otro que tiene que ver con el uso de la marca Televisa /
Raquel Alvarado Torres, aislada en celda de máxima seguridad
Elementos de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en
Delincuencia Organizada (SIEDO) de la PGR y efectivos de la Policía
Federal Preventiva (PFP) catearon ayer la narco-mansión ubicada en la
calle 19 No. 559 por 21 de Altabrisa, dos meses después de que el
gobierno nicaragüense detuvo al grupo de 18 narcotraficantes encabezado
por Raquel Alvarado Torres (a) Raquel Alatorre Correa y a ocho días de
que POR ESTO! difundió la ubicación precisa de los 9 predios que esa
lideresa había adquirido en Yucatán.
Los agentes de la SIEDO, que llegaron de la capital del país para llevar
a cabo este operativo, arribaron a Altabrisa en tres camionetas negras y
dos tipo Van de color blanco con el logotipo de Policía Ministerial
Federal, se estacionaron a las puertas de la narco-mansión y
permanecieron allí durante varios minutos.
El cateo comenzó a las 11 y media de la mañana, luego de que elementos
fuertemente armados de la PFP acordonaron la zona. Los policías se
apostaron sobre la 21 con 22 y cerraron el acceso a todo tipo de
vehículos, en perjuicio de los vecinos del lugar, quienes sólo podían
transitar a pie, previa identificación.
“Pueden pasar caminando, no tomen fotos y video, pues se está realizando
una diligencia ministerial”, advertían los uniformados a los
ciudadanos.
Alrededor de las 12 del día los agentes entraron al inmueble, luego de
que dos cerrajeros lograron abrir el pórtico principal de la
narco-residencia que se encuentra abandonada desde mediados de agosto
pasado.
Durante el transcurso de la tarde, los agentes de la SIEDO entraban y
salían del inmueble con cajas y sobres cerrados. Los reporteros seguían
las acciones a distancia, pues nunca se les permitió acercarse.
En un principio se comentó que la diligencia duraría cuatro horas, pero se prolongó hasta después de las 10 de la noche.
A eso de las siete de la noche uno de los portones eléctricos se abrió y
llegaron al lugar dos grúas de la Secretaria de Seguridad Publica: la
936 y 938.
Los vehículos de arrastre entraron al predio de reversa y pocos minutos
después sacaron del interior una camioneta Cayenne color rojo vino
placas JHP 7333 de Tamaulipas y un lujoso Porsche Carrera negro placas
JHY 3046, con valor aproximado al millón y medio de pesos.
Adentro permanecieron hasta entrada la noche una camioneta Cadillac
Escalade de color blanco y una camioneta Cherokee de color azul, ambas
con placas de Tamaulipas.
Con la retirada de los dos primeros vehículos los agentes de la SIEDO
dieron por concluido el cateo y permanecieron a las afueras apoyados por
agentes de la PFP.
Fue entonces que los reporteros que acudieron a cubrir la diligencia
decidieron acercarse al narco-predio, pero se toparon con la negativa de
los efectivos de la PFP, quienes incluso utilizaron las camionetas
oficiales para impedir el paso de los comunicadores; no sólo eso: uno de
los uniformados le aventó el vehículo a un reportero cuando caminaban
sobre la banqueta junto con otros compañeros.
Las camionetas de la PFP subieron a la banqueta con la clara intención de impedir que se acercaran los periodistas al lugar.
Finalmente se permitió a los reporteros permanecer en la calle 21 por 24
a unos 50 metros del inmueble. La zona estuvo cerrada hasta cerca de
las 10 de la noche.
Se informó que los vehículos restantes serían retirados en el transcurso de la noche.
Según averiguamos, el cateo se realizó con base en un oficio que giró la justicia nicaragüense a la PGR.
Sí investigan a Televisa
Como saben nuestros lectores, los narcotraficantes mexicanos fueron
detenidos en Nicaragua cuando se desplazaban en 6 camionetas con el logo
de Televisa, en las que trasladaban 9.2 millones de dólares en
efectivo, además de que se encontraron rastros de cocaína en los
vehículos.
Según información recabada por el gobierno nicaragüense, esta célula
operaba desde 2008 por toda Centroamérica y utilizaban para sus
desplazamientos una flotilla de hasta 20 camionetas de Televisa, empresa
que hasta la fecha no ha podido deslindarse claramente del escándalo.
En su oportunidad apuntamos que resulta del todo increíble que la cúpula
de ese corporativo, del que Roberto Hernández Ramírez posee el 20 por
ciento de las acciones, no se hubiera enterado de esta situación y, peor
aún, de que no la hubiera denunciado ante las autoridades
correspondientes.
El fiscal nicaragüense Armando Juárez precisó ayer que en su país hay
dos expedientes abiertos: uno en contra los 18 mexicanos capturados el
19 de agosto pasado en Las Manos, puesto fronterizo ubicado en Nueva
Segovia, al Norte del país frontera con Honduras, y otro que tiene que
ver con el uso de la marca Televisa.
Los detenidos son acusados de crimen organizado, transporte
internacional de droga y lavado de dinero y en caso de ser declarados
culpables enfrentarían hasta 30 años de prisión.
La precisión del fiscal deja claro que no se ha dado por buena la
denuncia de Televisa, en el sentido de que ninguno de los detenidos es
empleado suyo y que las camionetas no son de su propiedad.
Apenas ayer informamos que la Corte Suprema de Justicia de Nicaragua
decidió adelantar la fecha de inicio del juicio para el próximo 9 de
noviembre, por razones de seguridad, pero también para evitar la
“contaminación del caso”, pues están conscientes del poder corruptor del
dinero que maneja Roberto Hernández Ramírez, operador financiero de los
cárteles mexicanos de la droga.
Armando Juárez recordó que la semana pasada la fiscalía solicitó
información a la Procuraduría General de la República de México sobre
Televisa.
“Ese (requerimiento) fue enviado el viernes pasado, aún está en proceso y
falta que contesten. La información solicitada fue para el expediente
que tiene que ver con el uso de la marca Televisa”, precisó el fiscal.
Aislada en celda de alta seguridad
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