¡¡Exijamos lo Imposible!!
Casi el país del 100 en todo
María Teresa Jardí
Un honor para el PAN el haber logrado dejar convertido a México en el país del ya casi cien por ciento en todo. Con el cien por ciento de más millones de pobres y con el cien por ciento de funcionarios, legisladores y ministros con los salarios más altos del planeta. Un honor para Fox el haber convertido al país en una nación de ludópatas y un honor para Calderón el haber logrado convertir a la república en el lugar con menor seguridad pública del planeta.
Queda claro que de derecha son también casi el cien por ciento de los integrantes de la clase política y el sin el casi de la empresarial y de unas cuantas organizaciones no gubernamentales —muchas sólo de membrete— que se encuentran convertidas en apoyos de esa ideología a pesar de hacer transitar hoy al país por su expresión más perversa, por una razón muy sencilla: sus integrantes viven de las limosnas que les tira la mafia que usurpa el poder.
El IFE ofreciendo pagar, hagan cola miserables, podría muy bien decir su eslogan, para que promuevan que la gente vote. Va a pagarles, como se dice que García Luna le paga a la señora Morales Ibáñez para que a él lo defienda y no a las víctimas. De esa forma distrae a las más o menos comprometidas de sus denuncias sobre las brutales violaciones a los derechos humanos impunemente ejecutados aquí también de mala manera. Comprando para que pierdan el tiempo en el relevo de personas que van a funcionar igual de mal o incluso peor. Calderón es un buen ejemplo de que podíamos llegar a sufrir a alguien peor que Fox, que por no ser, ni siquiera se enteró de que fue Presidente. Ladrón como el que más, en manos de una mujer tan siniestra como la Gordillo y con hijos que Jorge Hank Rhon debe envidiar. Pero, sí, aún podemos estar peor y eso que Calderón es un genocida. El PAN garantiza eso.
Un honor para el usurpador y para su propio partido la entrega de cuentas de diez años de atroz desgobierno habiendo logrado convertir al país ya casi de 100 en todo. Casi 100 asesinados ejecutados impunemente cada día. El 78 por ciento de maestros reprobados se acerca bastante ya a esa cifra. Y ni qué decir del sesenta y dos por ciento (en cifras conservadoras) de presos por robar dulces, desodorantes, alambres de una jaula de perico, un cargador de baterías o un jugo y una playera... (La Razón 28 de julio de 2011) Y eso que sólo son datos de una parte de una radiografía elemental y no exhaustiva elaborada por Pastoral Penitenciaria en algunas cárceles de lo que no es ya una república. La división de poderes no existe porque como en los tres poderes los abusos son totales, las complicidades están presentes y los encubrimientos garantizados por la impunidad que como regla del sistema se garantiza a sí misma la clase política.
Esto es el México de la era panista. Un país que casi alcanza en todo lo perverso el cien por ciento con datos conservadores porque tampoco es que se tenga todavía ni la radiografía completa ni menos aún la documentación de lo mucho perdido por el pueblo como decisión de la siniestra clase política desde la llegada con De la Madrid, seguido por Salinas, peor que el anterior y por Zedillo, aún peor que Salinas, llegando a Fox peor todavía que Zedillo y peor que todos juntos Felipe Calderón.
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