Endurecimiento oficial Lilia Arellano
Estado de los Estados
“Oídos sordos” a demandas de maestros
Slim lanza tabla de salvación a la reforma
Debilidad económica se expande: Banxico
Peña Nieto asume costo de sus iniciativas
Aumentan secuestros 200 por ciento: ONG
Pronto, el espectáculo de la glosa del ¿?¿?
“Dejemos a los envidiosos la tarea de proferir injurias y a los necios la de contestarlas”: Louis Emmanuel Dupaty.
Dice el refrán que no hay mal que dure cien años ni enfermo que lo resista y tal parece que esa es la actual apuesta del gobierno federal: dejar que los maestros se cansen, llevarlos al punto de la desesperación por no encontrar ningún eco a sus demandas y seguir durmiendo casi a la intemperie, de no bañarse, de comer cualquier bocado, de tener que ir a suplicar por un servicio sanitario, de observar las duras miradas a su paso, de enfrentarse cada tiempo al reporte que advierte que siguen las negativas, que los ven pero no los escuchan, a que empiece la desconfianza de unos y otros y el movimiento se pulverice.
La entrada a respaldar la educación hecha por Carlos Slim habla del tejido oscuro que existe en la actuación gubernamental y de los manejos y acuerdos a los que llegó Peña Nieto con los poderosos.
De ahí su regreso intempestivo dejando sin concluir su participación en el G-20; de ahí que se mostrara dispuesto a imponerles una carga fiscal mayor a sabiendas de que no habría reacción negativa por parte de los gigantes mexicanos, ya que a cambio se les abrirán las puertas para extraer oro negro a raudales, sin otro freno, con todas las canonjías que en cada privatización se les han otorgado.
Entró Slim al terreno educativo justo después de otro nuevo y fallido intento de los maestros por cambiar en la realidad y la práctica el rumbo educativo, pero se toparon con la misma postura del titular de Gobernación, con igual orden de desalojar el Zócalo y ahora sí rapidito porque el Ejecutivo, que no los puede recibir aunque su sueldo sea liquidado con los impuestos que pagan ciudadanos con los mismos derechos de los inconformes, tiene planeado ir a celebrar el 15 y el 16 de septiembre. ¿Será que por el sólo hecho de ser miembro con todos los honores de la Universidad Anáhuac y contar con ilimitada influencia con los “Legionarios de Cristo” don Carlos ya es erudito pedagogo?
Usar la fuerza pública para detener las protestas de los maestros también gana terreno en los sectores oficiales. Incluso en la Cámara de Diputados, al escribir estas líneas, se debatía la propuesta del panista Jorge Sotomayor de exhortar al Gobierno del Distrito Federal a usar la fuerza pública contra los maestros, resaltando los hechos violentos del miércoles pasado.
El coordinador del Movimiento Ciudadano, Ricardo Monreal, destacó que sería lamentable que se usara a las fuerzas armadas para reprimir al pueblo. Ricardo Berdejo, también del MC, llamó a los gobiernos federal y capitalino a no utilizar la represión para liberar el Zócalo con motivo de las fiestas patrias.
En el terreno político la tendencia oficial es al endurecimiento, la aplicación de la táctica de desgaste que tan lamentables resultados dio en el caso no sólo del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) tras la desaparición por decreto de Luz y Fuerza del Centro, que tuvo como principal consecuencia el encarecimiento de la energía eléctrica para todos los consumidores del Valle de México. También se vio recientemente en el caso de los trabajadores de Mexicana de Aviación, cuya lucha a pesar de todo permanece, mientras que el causante de la quiebra de la aerolínea no sólo encontró impunidad a plenitud sino que disfruta de su fortuna sin que haya recibido sanción alguna.
Y hablando de los electricistas, integrantes del SME marcharon ayer del Monumento a la Revolución al Senado de la República, en donde entregaron a senadores de izquierda (Manuel Bartlett, Alejandro Encinas y Gabriela Guevara) una petición para que el suministro de energía eléctrica sea derecho constitucional y reducir la tarifa de este servicio que presta la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
De ahí partieron hacia la Cámara de Diputados a entregar 317 mil 517 firmas con dicha solicitud. En el contingente participaron también miembros del Sindicato de Trabajadores Transportistas del Distrito Federal y de la Asamblea Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica.
DEBILIDAD ECONOMICA
Mientras tanto y con el río revuelto en el campo económico, el gobierno de Enrique Peña Nieto sigue enfrentando dificultades que los integrantes de su gabinete no saben resolver. De hecho, el Banco de México reportó ayer que la actividad económica se debilitó en todas las regiones del país durante el segundo trimestre del año, al punto que la construcción de viviendas -un sector al que el gobierno federal propuso imponer un gravamen- se mantuvo estancada.
Banxico informó que también continuó la desaceleración de la creación de empleos formales, medidos a partir de la incorporación de afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Esta fue más acentuada en las regiones norte y sur del país.
Tras las primeras muestras de apoyo a la reforma hacendaria del gobierno federal, de inmediato surgieron las protestas por medidas propuestas que afectan a diversos sectores, especialmente el empresarial. Por ejemplo, especialistas de la Consultoría IY advirtieron que la iniciativa de reforma hacendaria del presidente Enrique Peña Nieto va en sentido contrario a la tendencia mundial y recargará la carga fiscal en las empresas, lo que hará menos competitivo al país y desalentará la llegada de Inversión Extranjera Directa (IED).
También el banco de inversión Merryl Linch sostuvo que la reforma hacendaria tendrá impacto en el índice inflacionario, pues añadiría 80 puntos base a la inflación en México para ubicarla en 4.5 por ciento en 2014.
Diversos sectores productivos han levantado la voz para oponerse a varios de los renglones de la propuesta que defiende Luis Videgaray: representantes de productores cañeros, de la industria refresquera y comerciantes en pequeño formaron un frente de oposición al impuesto a las bebidas saborizadas con azúcares añadidos.
Argumentaron que provocará una baja de hasta 20 por ciento en las ventas de refrescos al consumidor final, lo que pondrá en situación de quiebra a productores de caña e ingenios azucareros.
En el Senado de la República, la bancada del PAN acordó no aprobar ninguna reforma económica, en tanto no se avale una reforma político-electoral. También desde la Cámara alta salió una solicitud a los diputados federales para que analicen la posibilidad de rechazar el incremento del 11 al 16 por ciento de la tasa del IVA en la región fronteriza que, arguyeron, causaría un efecto regresivo que pondría a las clases medias y bajas en situación de desventaja.
A pesar de todas las criticas a esta reforma, el presidente Enrique Peña Nieto afirmó en Ciudad Valles, San Luis Potosí, que su gobierno “asume el costo” que pudiera tener su propuesta, pero no explicó cómo los sectores afectados tendrían también que “asumir el costo” de los gravámenes propuestos para compensar la pretensión de compartir la renta petrolera con empresas privadas, nacionales y extranjeras.
Y hablando de los hidrocarburos, el gobierno federal arreció su campaña para que sea aprobada la reforma energética. El director de Pemex Exploración y Producción, Carlos Morales, advirtió que al no tener esta reforma, las pérdidas ascienden a 100 millones de dólares diarios, cantidad que representa un millón de barriles por día. Así y sin ningún rubor destapan lo que en reiteradas ocasiones hemos manifestado en estas líneas: construyen diversos y caóticos escenarios para sacar adelante lo que más les interesa y con lo que consideran recibirán ingresos frescos para sus bolsillos y darle una barnizada al bache: entregar el petróleo, las reservas petroleras, dejar que sigan reproduciéndose capitales sin que el país y sus ciudadanos logren salir del subdesarrollo.
OIDOS SORDOS
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