domingo, 6 de mayo de 2012

La incontrolable capacidad de indignación

¡¡Exijamos lo Imposible!! 
No cualquiera
María Teresa Jardí 

A gente como Eduardo “El Búho” Valle se les cobra con la condena a la miseria, por parte de los que exigen la aplicación del sistema neoliberal que deja fuera a millones de personas.

El “Búho” Valle nació con genes de luchador y con una valentía que superó todas las pruebas. Eligió ser un hombre honesto y creyó que era posible dar la batalla en contra de la delincuencia organizada y por eso aceptó la invitación de Carpizo MacGregor, cuando éste era titular de la PGR, a colaborar en esa institución, ya tocada sin remedio, como luego quedó claro también para Jorge. Institución convertida un poco más tarde por Ernesto Zedillo, quien en mala hora llegó a la Presidencia destinada para otro, en cobradora de venganzas de los enemigos del pueblo mexicano que usurpan el poder como bien propio.
El “Búho” Valle fue condenado a la miseria por el sistema que no perdona a nadie que viola las reglas impuestas por los grandes capitales.

No es la lucha por el tráfico de drogas la que cuelga personas en los puentes ni la que tira cabezas de seres humanos debidamente cortadas por kaibiles a los que el poder político mexicano les abrió las puertas, para que el imperio pudiera realizar, a través de la derecha panista, la limpia de pobres que en México se realiza IMPUNEMENTE y sin que se horrorice, como debiera, la humanidad entera.

Lo que está detrás de los cadáveres mutilados es la lucha por el poder político que en los sótanos se juega. Lo sabía “El Búho” y se había convertido en alguien que estorbaba a eso que seguimos llamando “gobierno”. Tuvo que ir a vivir en el país responsable de la aplicación, como siervo de los que mandan, de un sistema que todo lo que toca pudre. Responsable de que las cosas hayan llegado al punto de quiebre, quizá sin reversa en el caso mexicano, o al menos no en el corto plazo, que con el mundo se acaba.

Nos entretenemos con minucias como si el “debate” se transmite o no en cadena nacional. A sabiendas en el fondo de que ni de un debate se trata. De que en el mejor de los casos se atacarán unos a otros. Pero incluso puede que ni eso hagan y debidamente puestos de acuerdo los candidatos se limiten a ofrecer, lo que desde siempre han ofrecido los que buscan llegar, en la inteligencia de que, como nadie les va a pedir cuentas, nada tienen que cumplir.

En un debate, que fuera debate, como en un Poder Legislativo con representantes del pueblo, se discutiría, hoy por la noche, cómo llegar a la cabeza del que abrió las puertas a los kaibiles. Muy probablemente vinculado a los mismos que a “El Chapo” le abrieran las puertas del presidio para convertirlo en el más rico capo del planeta.

“El Búho” creyó sinceramente y perdió la paz y la tranquilidad y de manera temprana hoy pierde la vida.
Aunque, ciertamente, muchos darían lo que fuera a la hora de la muerte por presentarse, como “El Búho”, sin duda habrá hecho, ante Caronte, con las únicas monedas que compran el traslado a lo mejor de nuestra última aventura. La de Eduardo Valle fue una vida plena que le permite llevarse como compañeras de viaje a su incontrolable capacidad de indignación, la valentía que siempre lo definió y al lado de su honradez, el no haber renunciado nunca a su espíritu de lucha siempre por las mejores causas... Monedas de cambio que a final de cuentas también son las que justifican la vida. No cualquiera.

No hay comentarios: