Incalculable riqueza
Lilia ArellanoEstado de los Estados
Un misterio el dónde, cuánto y cómo
Más valiosos los reportes de la salida
Lanza consulado otra perniciosa alerta
122 periodistas muertos de 2000-2012
Los Beltrán Leyva infiltraron a Sedena
“Si no peleas por acabar con la corrupción y la podredumbre, acabarás formando parte de ella”.- Joan Báez
Entre alertas, declaraciones patrimoniales dignas de un estudio psicológico más allá del económico o del referente de transparencia, situaciones nada claras con relación al petróleo, a la energía eléctrica, a la apertura de mercados como el representado por el Dragon Mart, han transcurrido las últimas horas en las que, para variar, los índices de crímenes de los que se acusa a las mafias, a la delincuencia organizada y hasta a los perros, no dejan de ir a la alza, en posiciones muy envidiables para cualquier bolsa de valores mundial. En tanto y a otros niveles crece el número de pobres, de desempleados y de amparos contra las reformas que fueron la cereza del pastel de un Pacto por México representado por las máximas ruindades partidistas.
Enrique Peña Nieto hizo alardes de lo que en otros países en el mundo es lo más natural: hablar de sus bienes, del monto total de lo que posee económicamente al iniciar el mandato para, si en verdad se cumplió con la ley hacer lo mismo a la salida, porque lo importante de saber cuánto poseen es al momento en el que abandonan el poder, no cuando llegan a él y ejemplos nos sobran. Felipe Calderón era un auténtico clasemediero, un burgués sin gran fortuna que viajó y se hospedó en buenos hoteles porque era el secretario de un panista al que le cubrían sus gastos porque tampoco era adinerado, situación que suplía con inteligencia y astucia.
Al término del sexenio, se sabe de una cuantiosa fortuna acumulada que se rumora es muy superior a la lograda por Vicente Fox quien también era pobretón, un empresario no sólo mediocre sino fracasado bajo cuya tutela se perdió gran parte de la fortuna familiar. Ahora goza de un riqueza impresionante que se une a la de su parejota, la señora doña Marta, quien también pasó del morralito a la bolsa de broche en un abrir y cerrar de seis años. Pero sería injusto solamente hablar de los panistas, los priístas hicieron también lo suyo y algunos en un exceso que ha levantado grandes furias.
Está el caso de un Ernesto Zedillo con cuyo sueldo de burócrata de nivel fue haciéndose de una clase media a la que no pertenecía cuando nació, sin embargo, al dejar la casona de Los Pinos se fue con cuentas bancarias abultadas, propiedades en varias entidades, inversiones de todo tipo. Don Carlos Salinas ya tenía mucho dinero cuando asumió la presidencia, el propio hecho a base de negocios que siempre ha realizado y el heredado por su padre. Pero se es rico ¿comparado con quién? Todo lo que ya poseía no resultó suficiente y para nadie es un secreto que es dueño de una inmensa fortuna y que no ha terminado de construir su patrimonio familiar de ese que disfrutarán hombres y mujeres que ya no llegará a conocer y que formarán pareja con sus nietos y bisnietos, ya que en varias entidades sigue buscando cómo hacerse de terrenos y se mantiene implantando asesorías y toda clase de monerías a través de empresas de las que son dueños sus vástagos.
Miguel de la Madrid fue otro que si bien nació entre pañales de seda, nada le resultó suficiente y en el caso de José López Portillo y de Luis Echeverría ni que decir. Ya seguir atrás es como escarbarse más y más las heridas, hacerse daño porque resulta difícil de creer que en tanto tiempo y habiendo tenido todas estas experiencias, no aprendamos a exigir información verdadera como la que representaría conocer cuánto tenía el señor Peña Nieto cuando asumió la gubernatura mexiquense y hasta dónde creció su fortuna personal durante los seis años de mandato, porque no está fácil y mucho menos barato mantener dos familias, tener amigas, hacer regalos, etcétera, etcétera, todas esas acciones que quién sabe si por fortuna o por desgracia tienen que emprender los guapos, los copetones, los galanes, los que quieren y anhelan ser y encuentran en las actividades sexuales su mejor tónico.
Dice don Enrique que le van a pagar 193 mil 476 pesos mensuales netos. ¿Eso es mucho o es poco? Habría que preguntarles, por ejemplo, a los alcaldes que ganan mucho más o a los magistrados de la “Tremenda Corte” quienes triplican ese salario o a los diputados y senadores quienes también perciben mucho más. O sea que ¿entre más responsabilidad menos salario? Y, si a esas vamos, pues entonces habrá que pedirle su opinión a los que ganan el salario mínimo una, dos y hasta tres veces para saber qué harían si llegaran a tener esas percepciones salariales. Si profundizamos solamente un poco, ese salario es un decir porque no pagará ni la luz y con eso se ahorró una millonada, tampoco el agua, ni el servicio doméstico, ni al chofer, ni a las nanas, ni pagará la peinadora, al peluquero, al maquillista, al modisto de la “gaviotita”, menos aún tendrá que desembolsar en colegiaturas, tampoco tiene que dejar para el gasto, para el súper, ni liquidar lo que se gasta cuando se tienen invitados a la casa, menos aún los vinos o la música o los regalitos para las muchachas. Si le sumamos todo eso que se le paga con nuestros impuestos, ¿cuánto realmente va a ganar el mexiquense?
Reportó que tiene 4 casas, 4 terrenos, un departamento, pero no dice cuánto valen ni dónde están. Sería bueno saber si son casas o mansiones, cuánto vale el terreno, la construcción pero también los contenidos, los autos, el guardarropa. En cuanto a las tierras ¿de cuántas hectáreas?, ¿en dónde? Porque no es lo mismo una o dos o tres o 10 hectáreas en valle verde que en Valle de Bravo y menos aún en Quintana Roo. Ahora que hay de departamentos a departamentos y, como muestra, está el que le comprara el ex dirigente nacional de PAN, el tal Nava, a su conductora infantil esposa y tampoco es lo mismo que se ubique en Tlatelolco o en la Roma o en la Condesa o en el propio Polanco que en Santa Fe o en los exclusivos fraccionamientos en los que hasta las glorietas tienen esculturas del tal “Sebastián”.
Reportó tener obras de arte y joyas heredadas, compradas y algunas donadas. En el primer caso, habría que conocer si son de Picasso o de Botero, si son lienzos o litografías, sobre todo saber cómo y dónde las adquirió, de dónde salió el dinero para comprarlas porque sus antecedentes familiares no dan como para que le hubiesen dejado en herencia ni un Cuevas. Eso de las joyas también es otro punto que merece ser mejor explicado, ya que pueden ser como las de la “Doña” que eran de una primera generación de diseños que posteriormente sería incrementado su valor o comerciales y ¿con qué clase de piedritas: diamantes, brillantes, ópalos, zafiros, rubíes? El renglón “donadas” sí que llama la atención, porque la última donación que conocemos ha levantado un gran escándalo y refiere el caso de una anciana y un cura abusivo y abusado. ¿Quién dona joyas a un hombre?
Tiene una cuenta bancaria pero no habla de las temibles tarjetas de crédito, de las de moneda nacional y de las de dólares, por supuesto no hay cantidad en ninguno de los casos ni en el de un fondo de inversión que también reporta. Ni qué decir del renglón que advierte que están en su poder monedas y metales, las primeras pueden ser de colección y, por supuesto, tendrán un valor excepcional o ser simplemente los conocidos y codiciados centenarios. No se necesita ser brujo, adivino ni banquero para no entender que en ese renglón de metales sólo puede tratarse de oro y tal vez de plata, pero eso sí, ni hablar del cobre ¿o sí? Tampoco dijo si tiene deudas hipotecarias, personales, en los plásticos. Es esta postura de nuevo total y completamente mediática, con rollo dizque político incluido, como todas las que hemos presenciado durante ya 46 días.
ENTRE ALERTAS TE VEAS
Ahora fue el turno para Jalisco. El consulado de Estados Unidos, en Guadalajara, lanzó una alerta “máxima” a sus ciudadanos ante el incremento de la violencia, de crímenes, secuestros y asaltos consumados en Colima y Jalisco, sobre todo en las zonas de playa, en las turísticas como Manzanillo, Puerto Vallarta, las más conocidas. Dice el comunicado que los estadounidenses deben postergar sus viajes, ya que hay una lucha feroz entre los cárteles de la droga, las organizaciones criminales y otras por controlar “la plaza”, principalmente en Manzanillo, donde tiene lugar el trasiego de droga. Los enfrentamientos, revelan, son entre: el cartel de Jalisco Nueva Generación, los Caballeros Templarios y la Familia Michoacana. Y tal señal de alarma, aunque duela, tiene bases ya que se registra en Colima un asesinato por día, lo cual dada su extensión territorial y el número de habitantes, nos habla de una gran crisis de seguridad. A ello habrá que agregar que ya se llegó al extremo de que los propios empresarios norteamericanos, instalados en México, han empezado a instruir a sus empleados sobre la forma en que deben conducirse al ser víctimas de ataques armados.
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