Patéticos lucieron la bola de acarredos en apoyo al Alcalde de MonterreyArma 'show' Larrazabal
ccamacho
En abierta rebeldía ante la petición de la dirigencia nacional del PAN para que se separe del cargo, el Alcalde de Monterrey, Fernando Larrazabal, protagonizó ayer un "show" en el que unos 200 simpatizantes le manifestaron su apoyo y donde anunció una consulta para decidir si pide licencia a su cargo o no.
Larrazabal dijo que será este sábado 10 de septiembre cuando anuncie su decisión final luego de analizar el tema con su Cabildo, con los panistas de Nuevo León y con los ciudadanos a través de llamadas telefónicas o encuestas por internet.
Aunque no dio más detalles sobre qué método usará para hacer las consultas, ésta parece diseñada para conseguir con facilidad un respaldo mayoritario gracias al control que el Alcalde ejerce sobre el Cabildo y a la aparente predominancia de sus simpatizantes en los órganos directivos del PAN estatal.
El martes, en medio del escándalo por la difusión de videos que vinculan a su hermano Jonás con presuntas extorsiones a casinos y a su Secretario de Desarrollo Humano, Miguel Ángel García, el Edil recibió la exigencia del CEN del PAN de solicitar licencia mientras concluyen las investigaciones.
Pero el Alcalde no pareció tomar con urgencia este llamado, pues ayer tuvo un día normal de actividades.
Al llegar a la Alcaldía lo esperaban con porras y tambores más de 100 simpatizantes, la mayoría, integrantes de las redes del Programa de Acción Comunitaria.
Fue hasta las 17:30 horas cuando se pronunció sobre el tema en una conferencia de prensa acompañado de su esposa, Eleonora Cárdenas.
"Analizaré en los próximos días las acciones de mi partido", dijo. "Lo haré consultando a miembros de mi Ayuntamiento, de mi partido aquí en Nuevo León y, principalmente, a quienes con su confianza y voto me eligieron como Alcalde: los regiomontanos".
En los tres grupos a consultar, Larrazabal parece poder controlar los resultados.
En el Cabildo, órgano integrado por 28 regidores y síndicos, regularmente 27 de ellos tienen una postura de apoyo y aceptación a las iniciativas del Edil, incluyendo 20 panistas, 5 priistas, una del Partido Verde y uno más del PRD.
Respecto a la consulta entre la población, Larrazabal no habló de una votación abierta –como lo hizo para definir el proyecto vial de una avenida de la ciudad–, sino de un sondeo telefónico o por internet, donde la estructura panista, soportada con empleados municipales, ya ha demostrado su capacidad de manipulación.
'El partido no manda'
Lo rodearon, lo abrazaron, lo besaron, le gritaron: "Ya se pudo", y "Futuro Gobernador".
Le cantaron a coro: "tú eres mi hermano del alma, realmente el amigo", lo arroparon de tal modo que hicieron retumbar, literalmente, el Palacio Municipal.
En lo que sería el día de decidir entre solicitar licencia a su cargo, como lo pidió en la víspera la dirigencia nacional del PAN, o continuar en la Alcaldía de Monterrey ignorando al partido, Fernando Larrazabal recibió una manifestación de apoyo al estilo priista.
Era casi mediodía cuando la figura de Larrazabal apareció de la mano de su esposa, Eleonora Cárdenas, al sur de la explanada del Palacio Municipal.
Aunque todos los días el Presidente Municipal arriba a la sede de gobierno por el sótano, ayer cambió su ruta.
En su improvisado camino fue a dar con unos 200 simpatizantes que llegaron una hora antes con carteles que rezaban: "El partido no manda", "Prensa vendida" y "Larry: 25 de agosto no se olvida, tú eres una víctima más".
El Alcalde levantó el brazo y sus seguidores, muchos de ellos participantes de las tres manifestaciones a favor de Larrazabal realizadas en los últimos cuatro días, se le fueron encima de inmediato.
"No a la licencia, no a la licencia", gritaban a una sola voz.
Entre las gritonas estaban Rosa Velia Herrera, quien minutos más tarde aseguró haber sido coordinadora electoral del PRI en el Distrito 2 durante 32 años y haberse cambiado al PAN porque el tricolor no cumplió sus promesas.
"Nunca nos cumplieron nada", dijo antes de que su gente abordara un camión de alquiler estacionado afuera de la Catedral.
Mientras Larrazabal intentaba abrirse paso, en el segundo nivel, policías municipales acompañados del director de Concertación Social, José Jaime García, intentaban quitar una manta a un par de mujeres.
"Gracias Sr. Presidente Calderón por darnos un respiro de seguridad en el estado, porque nunca hubo un 'Monterrey te quiero seguro', sólo ciegos y sordos", se leía en el mensaje que duró menos de cinco minutos en exhibición.
En la planta baja, empleados municipales que vestían camisas que tenían inscrito "Dirección de Participación Ciudadana" repartían entre los seguidores del Alcalde calcas con la leyenda "Yo creo en Larrazabal".
A las 17:15 horas, 21 cámaras de televisión y video de prensa local, nacional e internacional se amontonaron en la sala de Cabildo esperando la decisión de Larrazabal.
El Alcalde anunció que no dejará su cargo, al menos no en los próximos tres días.
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