¡¡Exijamos lo Imposible!!Preocupa AMLO al PRI
Estado de los ESTADOS
Lilia Arellano
Panistas no inquietan: Moreira
Ebrard, ¿un candidato aliancista?
Morena, plataforma de “El Peje”
SCJN dictaminará sobre el aborto
FCH aprieta por Ley privatizadora
“El enemigo sólo empieza a ser temible cuando empieza a tener razón”.-
Jacinto Benavente
Este lunes quedó integrado el Consejo Político Nacional del PRI, con mil 294 integrantes, que definirá el método para “elegir” a su candidato a la Presidencia de la República, con un propósito fundamental: establecer la estrategia a seguir para derrotar a Andrés Manuel López Obrador, aspirante presidencial de la izquierda, quien ya ha sido respaldado por el PT, Convergencia-Movimiento Ciudadano y Morena (Movimiento de Regeneración Nacional), y quien representa la única opción de un cambio radical en la conducción de México, que pueda hacer frente a las necesidades y requerimientos de más de 112 millones de mexicanos.
El líder nacional del PRI, Humberto Moreira, fue muy claro al señalar que la competencia para su partido en las encuestas de los aspirantes a la Presidencia de la República es, en estos momentos, Andrés Manuel López Obrador y no los aspirantes del PAN, Santiago Creel, Josefina Vázquez Mota y Ernesto Cordero, quienes no entusiasman ni a su propia familia. Ni por equivocación el coahuilense mencionó al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, como posible rival a vencer en los comicios federales del próximo año, a pesar de los enormes recursos que éste ha gastado para promover su imagen y remontar la ventaja que le lleva el tabasqueño en la preferencia electoral.
Aunque todo parece indicar que la única forma de derrotar al PRI, con el ex gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, como abanderado, en los comicios presidenciales del próximo año, es con la unidad de las izquierdas, no es descabellado que en las boletas electorales aparezcan tanto López Obrador como “el carnal” Marcelo, el primero respaldado por PT, Convergencia y Morena, y el segundo con el apoyo de la dirigencia formal del PRD. Rumores que han cobrado fuerza en los últimos días, dibujan un escenario en el que Ebrard Casaubón sería abanderado de una alianza antinatura entre el PRD y el PAN, luego de que en este partido, Felipe Calderón impusiera a su ex secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, como candidato y luego lo obligara a declinar a favor del mandatario capitalino.
La base de dicha especulación que no es nueva, se encuentra en que con un candidato propio el PAN no alcanzaría la victoria y no podría retener la silla de Los Pinos, como consecuencia de los pésimos resultados de la administración calderonista que no cumplió ni una sola de las promesas hechas al electorado durante la campaña presidencial del 2006, lo que sin duda le será cobrado en las urnas a Calderón. Por tal motivo, la estrategia a seguir sería la misma aplicada en las pasadas elecciones estatales en Puebla y Sinaloa, que dieron el triunfo al PAN con un candidato externo. Así, el “candidato externo” presidencial de Acción Nacional podría ser Marcelo Ebrard, con el claro objetivo de retener la Presidencia de la República y negociar una salida adecuada para los integrantes del gabinete calderonista que, de llegar López Obrador, tendrían que salir huyendo del país para no enfrentar sendos juicios por sus rapacerías.
Las acciones que a últimas fechas ha llevado a cabo Ebrard, también alimentan esa teoría. Así, al participar en el Coloquio Semipresidencialismo en México ¿Salida al estancamiento del régimen?, organizado por la Escuela de Administración Pública del Distrito Federal, el mandatario capitalino propuso un cambio de régimen para separar a un jefe de Estado, que atienda el orden exterior, y a un jefe de Gobierno que responda a las necesidades de organización en las cámaras, lo que incluye la existencia de gobiernos de coalición, entre distintas fuerzas políticas. En el foro donde compartió la mesa con Manlio Fabio Beltrones, quien también impulsa los gobiernos de coalición, y Porfirio Muñoz Ledo, consideró que si se organizan dichos gobiernos, el jefe de Gobierno contaría con mayoría en la Cámara para poder llevar a cabo sus programas, lo que no ocurre hoy en día.
También el delfín de Calderón, Ernesto Cordero, alimenta dicha teoría al pronunciarse a favor de establecer una alianza con miras a la elección del 2012. En conferencia de prensa, el ex secretario de Hacienda señaló que no obstante lo anterior, él construirá su plataforma política como ocurrió en 2006, cuando el PAN compitió solo en la elección presidencial. Cordero enfrenta un panorama adverso en la carrera por la candidatura al interior de su partido. El fin de semana, durante la conmemoración de los 20 años de gobiernos panistas en Guanajuato, que se iniciaron luego de una “concertacesión” de Carlos Salinas de Gortari con el PAN representado por Diego Fernández de Cevallos, Cordero recibió abucheos y rechiflas, mientras que los aplausos se los llevó Josefina Vázquez Mota.
En ese contexto, el riesgo de que Felipe Calderón opere para hacer candidato del PAN a Ernesto Cordero ha sido denunciado por muchos distinguidos panistas y ex militantes de ese partido. De ahí que Santiago Creel, aspirante a la candidatura albiazul, celebrara el compromiso hecho por Calderón de “no meter las manos” a la contienda interna, aunque dados los antecedentes del michoacano, el senador con licencia no debe de confiarse y debe estar atento a los movimientos que tienen origen en la residencial oficial de Los Pinos.
Lo anterior, a pesar de que es mera especulación no es política ficción. Tanto para el PRI, como bien lo señaló Humberto Moreira, como para el PAN, el candidato a vencer es Andrés Manuel López Obrador, quien se encuentra ya muy encarrilado en su precampaña presidencial rumbo al 2012. Su plataforma electoral la constituye, sin duda alguna, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) con el que puede prescindir sin ningún problema de la estructura territorial del PRD. El tabasqueño contempla constituir a Morena como una asociación civil el próximo domingo, a las 11 de la mañana, en el Auditorio Nacional.
Morena no será únicamente una asociación política sino que se constituirá como un movimiento amplio, plural e incluyente, en el cual participen millones de mexicanos, “hombres y mujeres libres, conscientes, con un objetivo superior, la transformación de la vida pública de México, como lo puntualizó el propio López Obrador en su mensaje semanal en tiempos oficiales del Partido del Trabajo. En Morena, dijo, participan “todos los que queremos sacar a México del atraso, de la postración en que se encuentra. Como hemos venido diciendo una y mil veces, de la pobreza, de la marginación, del miedo, del temor”.
El aspirante presidencial enfatizó que Morena representa para muchos “la última esperanza” para católicos, evangélicos, libre pensadores, indígenas, campesinos, pescadores, cooperativistas, obreros, trabajadores independientes, productores, comuneros, ejidatarios, pequeños propietarios, artesanos, artistas, intelectuales, maestros, estudiantes, profesionistas, comerciantes y empresarios.
En Pátzcuaro, donde acompañó a Silvano Aureoles Conejo, candidato al gobierno de Michoacán por el PRD, PT y Convergencia, López Obrador explicó que Morena busca la transformación del país, para lo cual ya se está organizando para vencer otra vez a la “mafia del poder” en las elecciones de julio de 2012. Ahí, sostuvo que “sólo el pueblo puede salvar al pueblo” y “sólo el pueblo organizado puede salvar a la Nación”, porque la “mafia del poder” no deja progresar a la gente.
Moreira no se equivoca cuando menciona al tabasqueño como el enemigo a vencer, sobre todo si, al momento del enfrentamiento entre candidatos oficiales, salen a relucir las cuestiones de índole personal en las que tanto panistas como perredistas y priístas tienen mucho que perder. Creel y los matrimonios e hija concebida fuera de ellos; Ebrard con demostrada inestabilidad familiar, con todo y que su primera esposa, muy moderna, no tenga empacho en convivir con sus antecesoras; Peña y su cuestionada viudez, así como la anulación del matrimonio eclesiástico de “La Gaviota”. “Chepina”, hasta ahora no ha protagonizado con su cónyuge ningún escándalo, como tampoco lo han hecho Beltrones ni Cordero. ¿Será tranquilidad? O tal vez ¿una vida gris?
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