Querétaro
Por Renegado Legítimo
23 de Enero, 2009
Por Renegado Legítimo
23 de Enero, 2009
A falta de mejor cosa que hacer el pasado fin de semana, se me ocurrió la idea de salir del DF a algún lugar cercano, y desintoxicarme un poco de esta ciudad que, si uno no se pone listo, termina por metérsele en el cuerpo, en la mente, en el alma y en todas partes, volviéndose una carga pesada y causando estrés y angustia constantes.
El sábado, después de haberle dado muchas vueltas (porque lo admito, en ocasiones la desidia hace presa de mí y me agarra la “fiaca”), terminé por decidirme: salí de la Central del Norte con rumbo a Querétaro.
Alguno de mis improbables lectores podría preguntarme el motivo de haberme ido a tierras panistas justo en fin de semana, cuando lo que quieres es descansar y relajarte, no andar enterándote de la bazofia que los panistas se han encargado de encumbrar como capataces para cuidarles el changarro mientras llegan las próximas elecciones (donde podrán volver a hacer fraude para renovar la concesión por otro periodo más). La verdad es que, como explicaré a continuación, lo bonito de Querétaro es justamente que no parece estar gobernado por el PAN, al menos por encimita. Es una ciudad limpia, sin problemas graves de vialidad (en lo que pude apreciar, ya me desmentirán los habitantes de esa ciudad), con los asegures propios de las grandes urbes, pero que sin duda muestra al menos un poco de sentido de planeación.
En estas tierras, a escasas dos horas y media del DF, y pese, insisto, a estar gobernadas a nivel municipal y estatal por administraciones panistas, se asienta una ciudad que combina el empuje próspero de la modernidad con la tranquilidad provinciana que le da ser una ciudad colonial llena de leyendas e historias. Y digo “pese a estar gobernadas” porque nada más hay que ver el cochinero que ha hecho el PAN con el país tanto a nivel nacional como en la mayoría de los lugares donde es gobierno: puro bagazo de políticos administrando ayuntamientos y gubernaturas. El propio estado de Querétaro no se salva: su “góber” es uno de los mandatarios estatales que con más insistencia ha sido denunciado por violar la ley electoral al usar, de acuerdo con los denunciantes, dinero público para promocionarse políticamente. Algo de mérito tienen los queretanos que sobrellevan tal rémora en Palacio de Gobierno.
No pretendo hacer una crónica de viaje ni mucho menos, simplemente me interesaba compartir estas reflexiones sobre cómo una ciudad, un estado, y por qué no decirlo, el país entero, no están condenados al horror económico, la violencia del crimen, la mediocridad, la corrupción y el cinismo tan solo por estar gobernados por los azules. La sociedad en su conjunto es mucho más que una pandilla de vividores del erario.
¡Bien por (la mayoría de) los queretanos!
Tilichero: Si dice Calderón que con Obama a México le va a ir bien, ¿a quién se refería cuando advertía del “peligro” de que llegara a la Casa Blanca alguien que quisiera revisar la relación comercial entre los dos países?
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