Nos están matando a los jóvenes

¡¡Exijamos lo Imposible!!
Crimen de Estado es la primera línea de investigación
María Teresa Jardí

David Sicilia, además de poeta e intelectual comprometido con las mejores causas, es un hombre público, que viaja al extranjero y cuenta lo que pasa en México. Y eso de entrada lleva a una primera línea —imprescindible— de investigación en el horrendo crimen cometido contra jóvenes en Morelos, entre los que se encontraba el hijo del poeta. Tomando en cuenta a quién beneficia el hecho, como marcan los cánones de toda investigación que pretenda resolver el homicidio, esa primera línea establece la posibilidad de que se trate de un crimen político.

¿A quién beneficia esa muerte atroz? Al usurpador, de entrada y al impresentable gobernador de Morelos, enseguida.

¿Y lo del mensaje dejado por los narcos? La pantalla que, de manera recurrente, utiliza el poder para explicar la limpia de jóvenes.

No debemos seguirnos engañando al respecto. En México se viene cometiendo un genocidio contra los pobres. Y una muerte así acaba con el padre. No hay ser humano que no quede tocado ante un crimen atroz como ese. Pero la sensibilidad necesaria que acompaña a los que se dedican a la poesía como su opción de vida, hace más imposible aún el reponerse del todo de ese hecho, en todos los sentidos inconcebible.

A un crimen de Estado apunta la última masacre de jóvenes en Cuernavaca.

Regreso a Moreira, porque como presidente del PRI tiene su importancia. Aunque esté convencida de que nadie en buena lid puede ganarle la Presidencia a AMLO en 2012. Y si, a base de fraude, la derecha panista se empeña en mantener el poder, va a conocer, el PAN también, lo que significa despertar al México profundo, al que se refiriera Bonfil Batalla. Van a enterarse los prianistas y sus chuchos perredistas, de lo que es capaz el pueblo, que nada tiene que ver con esa clase media televisivamente deseducada, pasto del fascismo, que mantiene al fecalismo, a pesar de que tampoco siente por ella ni el menor de los respetos la clase política.

Está bien que ataque lo de la canasta básica, Moreira. Pero en primer lugar tendría que haber señalado que fue un invento priísta y luego pasar a condenar el contenido engordador de la misma. Pan Bimbo, jugos Jumex y “Zucaritas” para que los más pobres mantengan el negocio de los más impresentables y ricos empresarios a la mexicana. Una canasta para convertir en diabéticos a los niños, quedó a la vista. Pero nada de eso dijo Moreira. Cuando en eso justamente estaba la nota para un político que a su partido espera llevar de nuevo al poder.

Dado el golpe, por Lozano, a quien el usurpador le debió hacer creer que sería el próximo candidato del PAN a la Presidencia. De ahí que se sienta presidenciable. No se entiende de otra manera cómo puede sentirse presidenciable el más impresentable, siendo impresentables todos, de los funcionarios fecalistas. Ni siquiera en la situación por la que México atraviesa, en la que hasta Juanito debe sentirse presidenciable, Lozano es presidenciable. El final del golpe contra Luz y Fuerza del Centro que, no debió darse y menos aún de esa indignante y brutal manera, es una historia que aún está por escribirse. Lozano no es inteligente, si lo hubiera sido le habría hecho ver al usurpador lo inconveniente de ese golpe canalla, incluso porque Luz y Fuerza tenía mucha más fuerza que la CFE. Más allá de lo criminal que era el dejar sin trabajo a cuarenta y cuatro mil trabajadores, jefes de familia y peor aún el hacerlo para entregar el manejo de la energía eléctrica a una empresa extranjera. A la nueva dueña, de la que era “nuestra luz”, le debió hacer ver, Lozano, que tenía que esperar al desenlace del problema entre el SME y el usurpador, para iniciar el abuso a base de la extorsión que significa el aumento irreal e irracional en el consumo. Cuestión de lógica y de elemental inteligencia.

El elegir al azar usuarios para aumentar irracionalmente los recibos, en la inteligencia de los que los pagan “se amuelan”, más allá de que le da más poder al SME, ante el que se va y se denuncia la arbitrariedad que la CFE comete, garantiza el regreso, en el Distrito Federal al menos, del uso de “los diablitos”. Cuestión de inteligencia. Como la mayoría no puede pagar los recibos y como los ricos no van a ser los elegidos para cometer el abuso, el resto se las ingeniará para resolver, de una manera u otra, el problema que les afecta. Cuestión de lógica.