lunes, 25 de febrero de 2013

Hoy el cuerno de la abundancia es basura

¡¡Exijamos lo Imposible!! 
Por Esto!
La Nación entre narcos, empresarios voraces y malos funcionarios
Álvaro Cepeda Neri

Conjeturas

Con más de 112 millones de habitantes, la Nación está atrapada entre los ladrones que son funcionarios y empresarios que abusan de su poder económico y delincuentes que, con los militares y policías contaminan con sus drogas, incluso a niños, y escenifican una guerra que lleva seis años y dos meses. Sobrevivimos una época de gran descomposición política, crisis económica y auge de la criminalidad, donde la Nación sufre el ascenso de malos gobernantes sin apego a la legalidad; narcotraficantes dispuestos a todo para conservar sus ilegales intereses, y toda clase de empresarios metidos a los medios de comunicación masiva (Televisa y Tv-Azteca), que lo mismo roban en sus bancos que en sus comercios, mientras las empresas paraestatales también roban por sus servicios y bienes, en el libre mercado, el capitalismo salvaje y la punta de lanza del neoliberalismo económico.

Si el PRI de López Portillo, De la Madrid, Salinas y Zedillo, habían corrompido al sistema-régimen y entregado, vía las privatizaciones, la economía pública y la privada a los patrones y empresarios; Fox y Calderón la administraron para beneficiar a los ricos, millonarios y multimillonarios que se han apoderado de la Nación, sus bienes, su territorio (Tv-Azteca es dueña de Chiapas); y funcionarios que desde los poderes de todo nivel saquean impunemente los dineros de la Nación, hasta tener financieramente quebradas a las entidades, mientras federalmente el saqueo a Pemex, dizque patrimonio de la Nación, la tiene al borde de entregarla, enmascarando su privatización, con la entrada de socios capitalistas para que se lleven las tres cuartas partes de la renta petrolera.

Malos funcionarios, delincuentes y empresarios voraces, tienen a la Nación entrampada en el desempleo masivo, menos escuelas y más cárceles; bancos que cobran servicios públicos con intereses; supermercados que monopolizan el comercio, mientras con sobornos ganan elecciones (Soriana y Monex); adquieren terrenos donde se les pega la gana (invadiendo zonas arqueológicas: como en las pirámides de Teotihuacan) y se roban la arena blanca de Cancún invadiendo lo poco que resta de la zona maya, depredando al país entero. Los narcos tienen sus territorios, porque desde De la Madrid los dejaron adueñarse e imponer la ley de la selva. Fox y Calderón fueron cómplices de ese desastre.

La Nación, pues, sobrevive angustiosamente en una encrucijada por los enfrentamientos entre delincuentes y las fuerzas del orden, por el hambre de 54 millones, por millones de jóvenes sin trabajo y sin ingreso a escuelas superiores; matrimonios deshechos por la crisis social, familiar y las carencias económicas. El retorno del PRI, con las audacias de Peña, no parecen ser la solución (mientras el entorno empieza a crearle problemas, que sólo la mano dura del autoritarismo podría, quizá, mantenerlos a raya sin resolverlos). Necesitábamos un Estadista para resolver los problemas, y no lo hay. Mientras, la Nación ha entrado a una crisis política que puede estallar al estilo de España o Grecia, en un contexto mucho más violento.

cepedaneri@prodigy.net.mx 

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