Videgaray: el hombre del maletín, guionista y operador de Peña Nieto
Alvaro Cepeda Neri
Prólogo Político
Se dio a la fama pública, no por sus habilidades para emparejar el debe
con el haber y trampear los ajustes del dinero, sino porque a donde
quiera que iba Peña, durante seis años de campaña, lo acompañaba con un
maletín hinchado de dinero. Recordamos que en cuanto un priísta estaba
en campaña para un cargo de representación, se aparecía Peña para
“ayudarlo”. Así fue comprando voluntades. Ya rascan a las finanzas del
Estado de México y a las inversiones en el extranjero de los cercanos a
Peña, una vez que Moreira ha sido defenestrado por el paradero de los
más de 30 mil millones de pesos. Parece que hay mucha cola entre ellos y
la cloaca se puede destapar una vez que sea registrado candidato
formalmente. El calderonismo prepara una bomba y Ernesto Cordero tiene
la información. Los gastos en Televisa, Tv-Azteca y otros medios de
comunicación (periódicos y revistas proclives al peñismo), no sólo
fueron cooperación el Grupo de Atlacomulco.
Por lo pronto, el contador Videgaray con su diputación federal, es el
asesor, amigo y confidente número uno de Peña y su sombra como si fueran
gemelos. Videgaray también manejó la campaña de Eruviel Ávila (quien
chantajeó a Peña con que se iba por el PAN, si no era el candidato del
PRI) y lo hizo triunfar. Ha sido colaborador indispensable del peñismo
en todas las maniobras y se frota las manos porque lo harán secretario
de Hacienda para esculcarle a Cordero y Calderón en venganza; si Peña no
sufre antes un descarrilamiento. Ingresó, previo juramento al grupo que
ahora encabeza Peña (Jorge Toribio: el Grupo de Atlacomulco; editorial
Ágora), y es el mandamás de su jefe, amigo y cómplice. Videgaray dispone
y Peña lo deja hacer y deshacer, como su gurú.
Videgaray y Liébano Sáenz (el zedillista como cuña contra Salinas), son
los dos asesores que más escucha el candidato del copete. Y sigue el
maletín (con cadena a la muñeca, como los policías de seguridad
bancaria), para todo lo que se le ofrece a Peña, ya que éste y su grupo
todo lo arreglan con “poderoso caballero es don dinero”. Otro repartidor
de lo que contiene el maletín es David López Gutiérrez, “aceitador” de
medios de comunicación. Pero Videgaray es el director de la orquesta. Se
apuesta que en lugar de Hacienda, Peña lo manda a Gobernación con la
condición que ha puesto Videgaray: no subirse a ningún helicóptero ni
avión, por aquello de Mouriño y Blake.
La intención del voto por sondeos, vía encuestas a electores escogidos
de antemano o un azar manipulado, acusa que Peña va arriba, porque lo
conocen como “estrella” de Televisa. Empero nada hay escrito. Por eso,
el maletín de Videgaray viaja por todas partes con misiones secretas de
Peña, pues hay que seguir lubricando la maquinaria electoral. La divisa
es comprar en el mercado electorero, para que éste tenga vía libre. No
tarda en enfrentarse a sus adversarios del PAN y del PRD. Y encontrará
obstáculos que no resolverá el maletín de Videgaray… su operador
político, financiero y guionista para que Peña recite lo que aprendió de
memoria. Así que seguiremos viendo al maletín.
cepedaneri@prodigy.net.mx
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