¡¡Exijamos lo Imposible!!
MÁS ALLA DE UNA BORRACHERA
Lo que sucede en Jalisco no es cosa menor, ni graciosa, ni mucho menos aceptable: El gobierno de Emilio González Marquez esta entregando los recursos públicos a los grupos de la oligarquía de Jalisco, encabezada por el clero, los industriales y las televisoras a quienes les ha dado cientos de millones de pesos, mientras que la mayoría de los 125 municipios de la entidad tienen presupuestos anuales que menores a los 100 millones de pesos
No obstante, con una frialdad y un cinismo que asusta, en lo que va del gobierno de González Marquez se han entregado, que se tenga conocimiento público, casi 500 millones de pesos a grupos oligárquicos distribuidos de la siguiente manera: 124 millones a TELEVISA, 20 millones a TV Azteca, 80 millones a industriales locales y extranjeros, y casi 200 millones de pesos a la Iglesia Católica.
Este dispendioso uso de los recursos públicos ha sido ampliamente cuestionado por la sociedad jalisciense y por la opinión pública nacional, pero ya sabemos lo que piensa el gobernador de sus críticos (“me vale madre”, y “que chinguen a su madre”), y por supuesto, cuenta con el aval y el respaldo de los beneficiados, quienes sin rubor alguno han salido a defender sus botines.
Y mientras tanto, la clase trabajadora, allá mismo en Guadalajara, durante el desfile del primero de mayo, se lo dijeron en su cara: “En el desfile del 1 de mayo en Guadalajara, trabajadores de diferentes organizaciones sindicales unieron sus reclamos de mejoras salariales a la protesta en contra del gobernador Emilio González Márquez y del cardenal Juan Sandoval Íñiguez, por la megalimosna de 90 millones de pesos del gobierno estatal para la construcción del santuario de los mártires mexicanos.”
“En al menos cinco marchas, obreros, sindicalistas independientes, maestros y burócratas plantearon sus reclamos laborales y rechazo a la reforma energética, pero aprovecharon para lanzar consignas en contra del donativo del gobernador.
En las mantas que portaban se leía: “Cavernal y Etilio serán excomulgados”, o bien, “Etilio y Cavernal, mañana venimos a disculparnos”. También se pedía: “Etilio, cuando tome no gobierne”.
Es claro que una reacción como la del gobernador de Jalisco solo pudo haber sido provocada en condiciones de alteración de los sentidos, de ahí las ingeniosas frases de la gente a manera de protesta por las determinaciones del gobernante y sus reacciones. Pero más allá de la borrachera que lo desnudó, en realidad a quien dejó en paños menores es a la manera de gobernar de los grupos como el Yunque, cuyos esfuerzos gubernamentales están destinados a saciar el voraz apetito de dinero público de las oligarquías criollas y extranjeras y no a responder a las necesidades de la sociedad mexicana y de quienes menos tienen. Para ellos solo limosnas de verdad, y no las que le dan al cardenal Juan Sandoval.
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