Laboratorios van y otros ya vienen

¡¡Exijamos lo Imposible!!
4ª derrota del PRI: ganó la gente
Manú Dornbierer

Satiricosas

El PRI perdió en Guerrero. También en Oaxaca, Puebla y Sinaloa, pero allá, digamos, más “políticamente”, con coaliciones en las que participó el PAN. En Guerrero, estado perredista por excelencia, ganó la coalición de izquierda en favor de la cual declinó al final el candidato Marcos Parra del PAN. Fue todo diferente. Quizás Parra “votó” también como guerrerense, no sólo como panista. Y es que más que de un partido u otro, la victoria electoral le pertenece a la gente de Guerrero que decidió sencillamente “quiero éste para que me gobierne y no el otro”. Los guerrerenses le dieron una gran lección a México, al no tomar en cuenta en primera instancia a las mafias que son los partidos, sino a un individuo en el que confían. Desde su interinato, cuando sustituyó a Rubén Figueroa Alcocer, Angel Aguirre ganó simpatías de sus paisanos. Hizo buenas cosas por ellos, así no sea tan seráfico como anuncia su nombre. Y la gente sí tuvo memoria.

MANUEL.- No fue el caso del inestable Añorve. Durante la primera parte del interinato de su primo, como alcalde también interino de Acapulco, nombrado en 1997 en lugar de Juan Salgado, Manuel mostró su ambición política escaladora más que su vocación de servicio. De volada, en 1998, pidió licencia para competir por la candidatura a gobernador por el PRI, pero se la ganó René Juárez, por lo que tuvo que regresar a su cargo de alcalde por un ratito, pues en 1999 se hizo elegir diputado local al Congreso de Guerrero por el periodo 1999-2002. Pero no se aguantó hasta ese año. En 2000 ligó la chamba de diputado federal en la LVIII Legislatura, donde se quedó hasta 2003 e hizo migas con otro dip. ¡Felipe de Jesús Calderón Hinojosa!

No ligó nada más hasta que en 2006 fue asesor de Manlio Fabio Beltrones en el Senado, y tuvo por todos estos brincos la “maravillosa” oportunidad de abrirle la puerta “de atrás” a su cuate, lo que le permitió a Calderón tomar posesión como presidente espurio, cargo que le obtuvo el presidente panista en funciones Vicente Fox, como ha dicho y repetido él mismo con descaro sin que pase nada, con la ayuda de la expriísta Elba Ester Gordillo y sus maestros.

Pero como Felipe no le dio ningún hueso por su labor de conserje, en octubre de 2008 Manuel se volvió a elegir alcalde de Acapulco, para irse de nuevo a los 10 meses, dejando a Acapulco patas arriba. Y ya vimos lo que pasó. Con la tonta (considerada inteligente por muchos) Beatriz Paredes, y el muy inteligente, pero no en el caso, Don Beltrone, se hizo otra vez nombrar candidato del PRI a la gubernatura con obvios y desastrosos resultados, no sólo para él sino para el PRI, lo que en lo personal me da mucho gusto porque es una rocota en su camino para recuperar Los Pinos. Ya de PRIAN estamos hartos. Lo dicho en un artículo anterior (muy criticado por algún lector): La única esperanza es la izquierda.
Que quede claro. El triunfo electoral es de los ciu-da-da-nos guerrenses que salieron a votar a conciencia, sin miedo ni corrupción. Pero…

Todos metidos en la
elección-laboratorio

Calderón sin duda ordenó a Añorve reconciliarse con su ex enemigo Zeferino Torreblanca, quien con Sabines de Chiapas, en calidad de gobernadores disfrazados de perredistas, han sido pilares del espurio, igual que pilarzotes fueron los repugnantes priístas que deberían ser enjuiciados por muchos conceptos, Ulises Ruiz de Oaxaca y Mario Marín de Puebla, al que corrieron a gritos los poblanos el martes pasado al tomar posesión del estado el nuevo gobernador Moreno Valle, con la ínclita presencia de Elba Ester Gordillo, ya que el Partido Nuevo Alianza, alias PAÑAL, que le regaló Calderón participó en la alianza de Puebla, no así en la de Guerrero donde se fue de nuevo de la manita con el PRI. Higiénica política mexicana.
sigue leyendo