El que de plano tendría que irse es fecalitros

¡¡Exijamos lo Imposible!!

Opiniones y Comentarios

Julio Ricardo Blanchet Cruz

• En barrena y hacia el abismo…
19 agosto 2009

jrbc@diariolibertad.org.mx

Como si el Pueblo fuera el responsable de haber iniciado la absurda guerra al narcotráfico; guerra que evidentemente no se va perdiendo, pues desde un inicio ha estado más que perdida…

Felipe Calderón, de nueva cuenta intenta disculpar su ineptitud, declarando abiertamente que el Gobierno no puede solo. Y en un gesto de Democracia que finalmente no le queda, le echa la bolita al Pueblo (bueno a sus representantes) para que lo apoyen…

Pertinente aclarar a los amables lectores, que el que no puede, como bien dijo, es ¡su Gobierno!, toda vez que en el pasado, con pactos o sin pactos, con arreglos o sin arreglos, pero esto no sucedía. Estas matanzas y este desorden no se veían…

Pero en el colmo de la estulticia político-económica, aunque tratándose de quienes dirigen los designios económicos de la Nación no podía esperarse otra cosa. Ante la rotunda negativa de los priístas de aumentar los impuestos o de gravar con ellos a alimentos y medicinas…

En lugar de disminuir los excesos, que ya no gastos. Pues bien sabido es que Calderón se ha extralimitado en el presupuesto que le toca ejercer en Los Pinos, hoy jocosamente llamado “Los Vinos” por nuestro compañero Julio Hernández López, Astillero, y que todos los funcionarios viven del presupuesto como príncipes saudíes…

Todo lo que se les ocurre a los citados individuos, Calderón y Carstens, es abolir el ambulantaje, según esto para obligar a la gente a comprar en lugares establecidos y controlados por la Hacienda Pública, con el objeto de aumentar la recaudación fiscal…

Cuando proscribir el ambulantaje en tiempos de recesión (y falta de empleos) lo único que se va a lograr, en consecuencia, será aumentar la delincuencia común, y desde luego la organizada; ya que, como es bien sabido, finalmente los narcotraficantes son los mayores empleadores de México…

Sin soslayar que los ambulantes, en su mayoría, están controlados por los Partidos Políticos, por lo que tampoco le será nada fácil llevar a cabo semejante proyecto de retirarlos de las calles…

Resumiendo: Ni para dónde hacerse, nos encontramos en barrena y hacia el abismo. Quien ahora propone diálogo, antes fanfarroneaba de lo lindo y decía que él se la comía a puños…

Y no solo en el aspecto seguridad, sino también en el económico, sin querer reconocer que recibió un País y que en menos de tres años lo desbarató. Lo peor es que todavía falta mucho por pasar…

Lo difícil será saber si los mexicanos lo aguantaremos, pues el tiempo que le falta a Calderón para que deje la Presidencia (toda vez que no tenemos revocación de mandato) la que ciertamente nunca ganó, se antoja demasiado largo…

Faltando solo agregar que, mientras el Rector de la UNAM, el doctor José Narro Robles, advierte de un estallido social, las Autoridades declaran que la violencia está disminuyendo, precisamente cuando hace un par de días se contabilizaron 54 muertos…

Para terminar…

Aunque desde Brasil, donde anda de paseo el michoacano diciendo, para no variar, sandeces, dijo que haría cambios en su deplorable Gabinete de ineptos. Y la vox pópuli dice que el primero debe de ser enviado, no al a la banca, sino al banquillo de los acusados, es el del “catarrito” con el que no ganamos, literalmente, ni para vergüenzas…

Pero hay otros que dicen que debería ser el Procurador Eduardo Medina Mora, quien con sus declaraciones de que la delincuencia está más controlada que hace 15 años, da a entender que del asunto no sabe nada…

Pero a ciegas, el que se escoja, Kessel, Lujambio, Lozano, o cualquier otro, incluyendo al “doctor” de Salubridad, el tal Córdoba, que además quiere ser Gobernador, sería justificable que los enviara de regreso a sus casas…

Solo que los corren y aparte de que les siguen pagando su sueldo, al rato los vuelven a colocar. Como hizo con Luís Téllez, que si en comunicaciones y transportes no supo hacer otra cosa que perjudicar a AVIACSA, de la Bolsa de Valores es solo un figurín…

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.