EDITORIAL
Rectificar es de sabios.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación, ante la andanada de reproches recibidos al de entrada negarse a atender el caso de la Guardería de la muerte; si es que aún les queda algo de dignidad a los Magistrados, deberá el día de hoy rectificar la posición de Sergio Aguirre Anguiano y hacerse cargo del asunto.
Rectificar es de sabios decía el muy ilustre Kung-Fu-Tzé (Confucio) Aunque eso no necesariamente garantice que se hará Justicia; pues sabido es que la SCJN está al servicio de los otros dos Poderes de la supuesta República que vivimos.
Finalmente no sería la primera vez que los Ministros salieran con un fallo que no deja satisfecho a nadie, sino más bien todo lo contrario, y con un amargo sabor de boca.
Siendo pertinente de nueva cuenta acotar que mientras no se democratice el Poder Judicial, de tal manera que al ser electos por voto popular, los magistrados, quienes finalmente son los responsables de que exista impunidad, digan lo que digan, no tendrán autonomía y la Justicia seguirá siendo una frase electorera, pero nada más.
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