jueves, 20 de noviembre de 2008

¿Que se celebra el 20 de Noviembre?

¡¡Exijamos lo Imposible!!
Ex Día de la Revolución Mexicana
20 de Noviembre 2008
María Teresa Jardí


A mis compañeros de POR ESTO!, nuevamente amenazados por la fascista derecha que usurpa el Ejecutivo Digo, ex día, hoy, 20 de noviembre de 2008, y quién sabe cuántos años o siglos más pasarán antes de que se recupere la memoria. Ex día, sí, de conmemoración del inicio de la para siempre ya inconclusa Revolución Mexicana de 1910-1921. Como es evidente de eso tratan los lunes vacacionales que, como cambio cultural, la derecha, hoy además usurpadora, ha logrado imponer, al mismo tiempo que iba logrando --a base de compras millonarias en unos casos y con limosnas en otras-- de los legisladores a modo la construcción del entramado de leyes “perfectibles”, perfectamente útiles para proteger los intereses de las familias mafiosas dueñas del Poder y de la empresa en México y en otros lugares.

Un correo que circula por la Red, en mi caso enviado desde Panamá, alerta sobre el daño para la salud que la melamina que, por lo denunciado, ponen en los productos chinos que contienen leche, para abaratar el precio, con ese producto, alto en proteína, pero que al ser un químico industrial, utilizado en la elaboración de vajillas, tablas etc., se convierte en veneno para humanos y animales. Y al final del correo se exhiben empaquetados una serie de productos entre los que destacan los de marca BIMBO.

El dueño de la BIMBO, sin duda, es un hombre riquísimo. Un hombre que continuaría siendo riquísimo si su empresa funcionara con la intachable moral que sería esperable de una persona tan beneficiada por la suerte. Ya antes, recordarán, que con relación a los productos de la BIMBO en México se había denunciado algo similar y que la declaración del dueño fue en el sentido de que: “en México se hacía así porque lo permitía la norma”.

De la derecha, ya se sabe, que no hay que esperar nunca que a su vida la rija la ética. Pero lo inconcebible es que los ciudadanos del mundo sigamos consumiendo los productos que sin garantías oferta la derecha. La impunidad, garante de la corrupción convertida en pilar del sistema, lo permite todo. Y, el sistema, a la derecha, primero, pero seguida de cerca por la izquierda, va envolviendo en las mismas prácticas necesarias para que, convertidos todos en cómplices, cierren los ojos ante todo exceso asesino de la ética. Pero el problema de la corrupción también está directamente ligado a la no construcción de una ciudadanía capaz de no consumir determinados productos.

Lo mismo ocurre con la Coca- Cola y con los McDonald --más allá de lo buenos o malos que puedan ser-- en cuanto a que son representativos del Imperio, que ese demonio, al que Obama va a desplazar en enero, maneja asesinando a países enteros para robar el petróleo, que no debiera seguirlos consumiendo nadie en este momento. El único poder de los pueblos es el de no consumir, lo que sin ética, por las razones que sea, se oferte. Es lo mismo que la telebasura. Basta con no encenderla para acabar con ella.

En fin… Por no dejar escribo en la Internet en Goglee, las palabras: revolución mexicana y en el primer documento, que abro al azar, encuentro que dice que, la mexicana, fue la primera revolución del siglo XX en busca de cambios sociales. Una pequeña nota la elegida, que me mata de risa, por no ponerme a llorar como una Magdalena, al leer que consigna que: “El ideal de la revolución era crear una ciudadanía moderna con derechos y alfabetismo. La Constitución de 1917 fue, quizás, el logro más alto de la Revolución”.

Un siglo después los mexicanos hemos asesinado, a base de reformas legislativas a modo de la derecha usurpadora, a esa Constitución, que efectivamente fue la más avanzada del mundo. Somos un país de analfabetas funcionales, con millones que no saben todavía ni leer ni escribir, y con niños a los que se enseña a firmar un cheque, pero no a entender lo que leen; no hemos logrado ni siquiera que se respete el voto ciudadano y con un usurpador a la cabeza nos adentramos en un abismo de difícil salida a lo largo del presente siglo. Y me digo que ciertamente no hay nada que conmemorar hoy. País sin memoria y muerta la inteligencia condenados estamos a repetir una y otra vez la misma historia y pienso que ya asoma la cabeza el 2010.

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