¡¡Exijamos lo Imposible!!Opiniones y Comentarios
Julio Ricardo Blanchet Cruz
• Lástima Margarito…
23 julio 2010
jrbc@diariolibertad.org.mx
Aunque ciertamente ya es tarde, pues quien manda en nuestro México no es precisamente Calderón y su equipo de trabajo, al que quiere convertir en su guardia pretoriana civil (a su guardia pretoriana militar ya sabemos para lo que la utiliza)…
Para que en terminando su mandato, si las tranzas no le salen bien (que no le van a salir, pues les falta oficio) que haya a quien convertir en chivo expiatorio de todo lo que se les puede acusar….
Empezando por declarar guerras sin la aprobación del Senado…
Y es tarde, como arriba citamos, porque quien manda en nuestro México, es, sin duda, el dinero. Y resulta que, curiosamente, los que tienen más dinero que nadie, son los narcos…
Pero hubiera sido un buen intento democratizar el Poder Judicial, es decir, que los jueces y magistrados (de perdida los magistrados) de la Suprema Corte de Justicia, al igual que los integrantes de los otros dos Poderes, fueran electos por el Pueblo…
Fidel Herrera, Gobernador del Estado de Veracruz, acaba de “proponer” a dos cuates suyos para alguno de los dos sustituya a un magistrado saliente…
Los nombres y la trayectoria son lo de menos (Calderón y su ejemplo) con que sean cuates, basta. Lo que importa es el hecho de que mientras quienes juzguen a sus conciudadanos, no sean electos por el Pueblo y tengan el compromiso con quienes los eligieron, sino que sigan siendo designados, la impunidad continuará imbatible…
Si don Fidel hubiera propuesto democratizar al Poder Judicial, hubiera dado no la impresión de que quiere dejar compromisos que le cuiden las espaldas, sino todo lo contrario, habría dejado en claro que no tiene nada que temer…
Es una pena (“Lástima Margarito”) que don Fidel nunca hubiera atendido la propuesta que por varios medios se le hizo de democratizar el Poder Judicial (de cuanto le habría sido útil en estos momentos)…
En veces los colaboradores actúan por cuenta propia y dejan pasar asuntos de importancia y repercusión nacional…
Si no podemos volver a confiar en nuestros jueces, el Estado entero se convierte en una inmensa montaña de basura a la que todavía le quieren poner banderitas de colores con la palabra “Democracia”…
Y no podremos volver a confiar en ellos después de los fallos tan inexplicables que han dictado a últimas fechas…
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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