
Es motivo de orgullo que, a pesar de que han querido destruirnos, no lo han logrado ni lo lograrán. No sólo porque tenemos autoridad moral, sino porque las mujeres y los hombres que participamos en esta lucha, profesamos un profundo amor por nuestros semejantes y, más allá de alevosías y frente a todo tipo de adversidades, mantenemos la firme convicción de construir una sociedad más justa, más humana y más igualitaria
viernes, 13 de noviembre de 2009
Donde hay poca justicia es un peligro tener razón
La justicia, aunque anda cojeando, rara vez deja de alcanzar al criminal en su carrera.
¡¡Exijamos lo Imposible!!

Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario