El surrealismo de la normalidad
2009-05-18
2009-05-18
• Famiglia y silencio
• Omisiones y espotiza
Adiós al maestro…
Cuatro principios hay en la estabilidad, mi estimado: poder, corrección, nobleza y conocimiento.
Sugestiva la semanita que inicia con las derivaciones políticas del misil estallado por el ex presidente Miguel de la Madrid, a quien en una pésima estrategia de control de daños la famiglia tricolor, incluidos sus hijos Federico y Enrique, avaló y mandó silenciarlo ante un original rompimiento de ¿la Omertá? —código de honor siciliano que prohíbe informar sobre los delitos considerados asuntos que incumben a las personas implicadas—, arrojando más gasolina a un fuego político de pronóstico reservado para el tablero de este (des)gobierno.
Sobre todo cuando el invitado de lujo, my friend, es el ingrediente fundamentado en el miedo que infunde la complicidad y la ilegalidad en las divertidas travesuras.
Y hoy en pleno regreso a la normalidad del distintivo desmadre nacional, la novedad de que en Zacatecas, estado ¿narcogobernado? por Amalia García (que se encuentra muy ocupada tejiendo en la nube sideral) dio la nota internacional apareciendo en los titulares de medios electrónicos y escritos con la lindura del atractivo rescate surrealista de ¡53 reos! del penal de Cieneguillas, sin lujo de violencia. O sea, 53 finísimas personas fueron liberadas por los revoltosos Zetas (essentially the ones in charge) sin disparar un tiro por un comando armado de entre 20 y 30 sujetos, vestidos con uniforme de mAFIosos (qué, ¡¿hay de otros?!) en lujosas camionetas blindadas, sin resistencia y sin brutal sangría de por medio.
Chingón.
En las narices de la torpe gobernadora, del ilustrísimo secretario de Seguridad Pública Federal y de los extraordinarios servicios de inteligencia mexicanos... ocurre un episodio llevado a cabo con pulcra exactitud digno de script para la película del colapso rápido del estado fallido. Para este (des)gobierno que no logra detener la goliza de la organizada delincuencia que exhibe la ineptitud y/o complicidad de los gobernadores en turno.
Y perlitas de colores para el peligroso collar, amable lector, sobran.
Amalia de Zacatecas y Marco de Morelos son los epicentros del escándalo del organizado crimen. La primera con grotescas declaraciones que ocasionaron risas histérica here & there, y el segundo sin medir (although he had the information) el tamaño del sugestivo polvorín en el que está sentado… y asentado el quid político del culebrón.
Y en estos días de estercolero político, nada como aprovechar la volátil situación para llevar votos al molino. Nada como ensuciar, denostar, señalar, acusar, inferir, calumniar y contaminar la de por sí frágil y vulnerada arena electoral, en la cual el minúsculo árbitro (se entiende que los pasados del ife) brilla por su insolvencia ética y moral sumada a la descomunal imposibilidad por ponerle orden al evidente desorden.
Hoy que las campañas se encuentran full speed ahead y a todo vapor en youTube —donde el papel jugado por las televisoras es perversamente imprescindible— los estupendos problemas ya mostraron su mala cara. En Sonora existe una denuncia por parte del PRI por la omisión en la sugestiva espotiza de sus candidatos sin ser —hasta hoy— desmentida y/o confirmada por las lacritas encabezadas por Leonardo ante las pruebas priistas y, como aquí se ha documentado hasta el cansancio en estos últimos meses, la omisión de (el cacareado monitoreo) anuncios transmitidos es, literalmente, apabullante.
Sobre todo si la premisa del éxito o fracaso de una campaña electoral está basada en la promoción… o la ausencia de promoción en beneficio de otros partidos, yes?
A continuación anote el porcentaje transmitido vs porcentaje omitido en 20 ciudades del 6 al 12 de mayo.
Acapulco 64.20% vs 33.27%
Campeche 68.21% vs 31.79%
Chihuahua 66.87% vs 33.13%
Ciudad de México 64.48% vs 35.52%
Ciudad Obregón 82.82% vs 17.18%
Cuernavaca 70.80% vs 29.20%
Guadalajara 67.05% vs 32.95%
Hermosillo 81.54% vs 18.46%
León 82.12% vs 17.88%
Monterrey 79.00% vs 21.00%
Morelia 70.85% vs 29.15%
Pachuca 67.45% vs 32.55%
Puebla 77.34% vs 22.66%
Querétaro 66.23% vs 33.77%
Saltillo 69.11% vs 30.89%
Tijuana 63.00% vs 37.00%
Toluca 64.82% vs 35.18%
Torreón 60.73% vs 39.27%
Veracruz 73.59% vs 26.41%
Zacatecas 64.20% vs 35.80%
Resultando en un total de 58.16 % de la espotiza transmitida vs un 41.84% omitida en el tablero del inerte monitoreo electoral…
¡¿Así o más claro?!
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