“My way”, dirá el espurio
Conrado Roche Reyes
Conrado Roche Reyes
Vaya vaya, este país, o mejor dicho quienes lo dirigen, parecen empeñados en molestarnos. El nombramiento del nuevo Secretario de Educación es una abierta manera de gritarnos que “aquí se hace lo que nosotros queremos”, y ojalá los sectores de avanzada, los pocos intelectuales no alineados, el sector magisterial y todos en general que critican lo que ellos, con ideas exóticas critican acerca de este rubro tan importante, sean presa de cagalera y rabia. Por tanto, quedará al frente de dicha Secretaría el ameritado y gran maestro Alonso Lujambio, para así dar continuidad a nuestros planes de manejar absolutamente todo a nuestra manera de pensar. “My way”, dirá el espurio. Sustituye a una mujer no muy presentable que digamos, para que ella alcance una diputación amarrada, mas cinchada que un cebú de corrida de pueblo.
El nuevo titular en su discurso de aceptación para sacrificarse por los desheredados de México, pronunció nada menos que doce ocasiones la palabra más odiada por los habitantes de este país esponja: política. ¡Hurra!, buen comienzo. La política y los políticos son los conceptos y personajes más despreciados por la gente, esa que ellos tanto aborrecen. ¡Hombre!, restregarnos tantas veces aquello suena a provocación. Mas no parece importarles en lo más mínimo. Lujambio fue consejero del IFE, en la época que se fraguó la entrega del país a la derecha conservadora. Ese instituto por el que han pasado o fueron sus compañeros los Creel -Ave María-, los Gómez Mont -viva Cristo Rey- y toda la sarta de amigos íntimos que nos están llevando….¿a dónde?
El flamante funcionario jamás ha estado ligado al sector magisterial ni educativo en el sentido de planeación. Que es maestro del ITAM, la Ibero y la UNAM. ¿Y? El hombre está más que ligado, y muy estrechamente con sus broders en el poder y a sus más broders pertenecientes a los grupos ultra conservadores. Su formación es enteramente a la escolástica, métodos que seguramente intentará implantar siguiendo la desastrosa gestión de su predecesora, Josefina Vázquez Mota. El tipo viene del IFAI. Entidad encargada de proporcionar la información requerida por los ciudadanos. ¿Piensas honestamente, amigo lector, que dicha Institución nos daba la información que el pueblo pedía? Si tu respuesta es afirmativa, o eres muy ingenuo o vives en otro planeta o de plano eres un fanático. Claro que no, hombre. Nos informaban lo que ellos querían, a su imperial conveniencia. Ya lo decía Napoleón Bonaparte hace doscientos años: “quien tiene la información, es quien la proporciona, y nunca iré en contra mía”. La misma premisa aplica para los sufragios. Es un viejo axioma bolchevique y dice que en la llamada democracia del sufragio, ¿Quién es el que gana? El que cuenta los votos. Lujambio es experto en ello, en “abono” a su currículo.
Nuestro México, en materia deportiva -que es fiel reflejo de un sistema- somos de los últimos lugares. Ya vimos cómo en béisbol el equipo nacional perdió por “nócaut” ante Sudáfrica, un país en donde no existe béisbol profesional. Un sólo pítcher mexicano, llámase Rodrigo López u Oliver Pérez, gana más que el resto de las novenas participantes en su grupo. En fútbol, que tanto apasiona al país, se está en peligro de no acudir al mundial con jugadores que, al igual que los peloteros, uno solo gana mas que varias selecciones con las que compite “Rafa” Márquez, o Giovanni dos Santos).
Pero nos queda el consuelo de ser primer lugar de corrupción en América Latina y segundo del mundo. En educación no nos va tan mal. Estamos entre los ocho primeros en MALA calidad educativa. Esto es lo que el Sr. Lujambio va a arreglar. Simón, sure, sido, yes. Ya veremos cómo nos cambiarán todavía más la historia patria (sin ir muy lejos, aquí en nuestra ciudad existía hasta hace poco un parque, allí frente a la “plancha” llamado “Articulo 123 “. Hoy, ya no existe -el nombre- el parque sigue ahí, remodelado al exquisito gusto de las autoridades. Vergüenza. Shame. Vergonia.
Voy al tiempo: Podría asegurar que en un futuro cercano, volverán las oscuras golondrinas. Se revalorará a Iturbide. Al bien intencionado y liberal Maximiliano. Y no dude usted ni tantito que se hará lo posible por traer los restos de Don Porfirio para colocarlos en el Monumento a la Independencia….Neta, no exagero. Ya vemos cuántos cristeros que mataron, asesinaron, cometieron actos de terrorismos, son hoy santos venerados y canonizados por la Iglesia Católica, uno de los más tenaces aliados de esta contrarreforma. Y tratarán de borrar de un plumazo a su más odiado hombre del pasado, Benito Juárez.
Los cientos de miles de niños que conforman la población escolar -también entre los más atrasados-, tendrán una visión muy diferente a la que tuvimos el 90 por ciento de los mexicanos. Como el estudio en colegios de monjas y en Yale, imagínate lo que nos espera, mi buen lector. Todo esto, si los dejamos. Ustedes, quienes acudirán a votar tienen la última palabra. En caso de continuismo, nos espera el sinarquismo -que aquí entre nos, ya está en las más altas esferas del poder. Ya lo verán, cuando esto suceda, expresaremos ¡bienvenidos al mundo real! ¿Hasta cuándo aguantaremos esta pesadilla?
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