¡¡Exijamos lo Imposible!!
Proceso
Boston, la sombra del terrorismo interno
MÉXICO, D.F. (apro).- Luego de la cautela de las primeras horas del
lunes 15, el presidente estadunidense Barak Obama consideró ya como un
“acto terrorista” el ataque en el maratón de Boston, Massachussetts,
cuyo saldo, hasta ahora, es de tres muertos y 170 heridos, varios de
ellos con las extremidades mutiladas a causa del fuerte impacto de los
estallidos y una decena en condiciones muy graves.
La más reciente
información del FBI, responsable de las investigaciones, es que las dos
fuertes explosiones fueron ocasionadas por bombas caseras fabricadas en
ollas de presión, con clavos y fragmentos de metal en su interior. En
otras palabras, mecanismos muy rudimentarios, pero de una eficacia
mortal.
“Cada vez que utilizan bombas contra civiles inocentes es
un acto de terrorismo”, afirmó Obama, para también reiterar que hasta
ahora están investigando si se trató de un grupo extranjero o interno, o
de un solo individuo.
La sombra del terrorismo interno, provocado
quizá por algún grupo extremista o un individuo con esta capacidad de
burlar las medidas de seguridad, se ha vuelto a presentar en Estados
Unidos.
Lo ocurrido en Boston es distinto, hasta ahora, al famoso
ataque de Al Qaeda a las Torres Gemelas y a Washington la mañana del 11
de septiembre de 2001, pero guarda similitudes con cuatro sucesos
provocados por estadunidenses: el asalto a Waco, Texas; la bomba de
Oklahoma detonada por Timothy McVeigh, el tiroteo masivo en Columbine y
la matanza escolar en Virginia.
Todos estos hechos, como los
bombazos en el maratón de Boston, ocurrieron en el mes de abril. Fue el
19 de abril de 1993 que decenas de personas murieron en el asalto a
Waco, Texas, protagonizado por un grupo de la extrema derecha religiosa
de Estados Unidos. Fue el 20 de abril de 1990 que 20 personas murieron
en el tiroteo masivo a estudiantes de la preparatoria de Columbine.
El
19 de abril de 1995, Timothy McVeigh detonó una bomba en el edificio de
Oklahoma. El 16 de abril de 2007 se realizó la peor matanza en un
centro escolar, en la Universidad Técnica de Virginia, donde murieron 33
personas.
En los cuatro casos, el denominador común también fue
el acceso tan fácil a las armas de alto poder y el debate sobre la
prohibición a una más dura regulación en la compra de armas en Estados
Unidos que siempre genera la airada reacción de la derecha
estadunidense.
En Boston lo que generó aún más desasosiego fue la
explosión de estas bombas, casi de manera simultánea, con el objetivo de
causar el máximo daño posible y tener un alto impacto mediático. Lo
lograron.
Citadas por la cadena CNN, fuentes de la Secretaría de
Seguridad Nacional afirmaron que se trató de un “sofisticado y
coordinado ataque planeado”.
Prácticamente se ha descartado la
posibilidad de que sea algún grupo vinculado a Al Qaeda o a otras
organizaciones islámicas. El FBI se ha hecho cargo de la investigación,
lo cual apunta todavía con mayor fuerza a un ataque de índole interna.
El
jefe de las investigaciones del FBI, Rick Deslauries, mencionó que más
de mil agentes se han encargado de la investigación, pero no han ubicado
a ningún sospechoso ni tampoco nadie se ha adjudicado el atentado.
La
posibilidad de que grupos estadunidenses decidan utilizar métodos
terroristas para sembrar el miedo, generar un alto impacto mediático,
demostrando la vulnerabilidad de las medidas de seguridad en la mayor
potencia bélica del mundo, es una de las hipótesis más inquietantes de
lo sucedido en Boston, porque plantean un escenario nuevo en la ya
complicada situación del segundo mandato de Barak Obama.
Comentarios: www.homozapping.com.mx
No hay comentarios:
Publicar un comentario