Gabino un gobernador más del montón

¡¡Exijamos lo Imposible!! 

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Gabino Cué enredado con ulisistas, diodoristas, panistas… y perredistas
Alvaro Cepeda Neri
 
Conjeturas 

Los oaxaqueños que sufragaron por Gabino y su agua con aceite de panistas, perredistas y priístas (entre ellos Diódoro Carrasco, chaquetero del PRI al PAN, guiñándole el ojo al beltronismo y mediante su amigo Liébano Sáenz, muy a la calladita, apoyando a Peña), están decepcionados de él. Fintó que iba a proporcionar la investigación administrativa ante el Ministerio Público de la entidad y de la PGR, sólo para torear y mediante una transa, arreglarse con Ulises, quedando todo en una amenaza no cumplida. Y entre sus veladoras encendidas, tiene una a Cordero, a través de su secretario de Finanzas: Gerardo Cajigas Estrada, primo de los Borrego Estrada, antes los tres priístas, ahora conversos al PAN, vía su religiosidad.

Desde su fundación en 1946, cuando Ávila Camacho designó heredero a Miguel Alemán, tras la época de los generales: Obregón, Calles, Rodríguez, Cárdenas y él mismo; del arsenal priísta ha salido el 90 por ciento de quienes emigraron a otros partidos. Con excepción del PAN (aunque Clouthier y Fox anduvieron en las filas del tricolor de entrada por salida), pues sus afiliados y dirigentes más o menos han conservado (conservadores al fin) una tradición de oposición, no obstante que su principal fundador: Manuel Gómez Morín, era callista de hueso colorado. Tal vez los del PT nada tienen que ver con el priísmo; pero, Convergencia que cambió de nombre: Movimiento Ciudadano, el Panal y los Verdes, salieron de la matriz del PRI.

Gabino Cué Monteagudo, con su padrino y guía: Diódoro Carrasco, fue priísta de corazón, hasta que éste se fue al PAN, seducido políticamente por la Gordillo, quien quiere reintegrarse al PRI vía Peña y su corrupto discípulo: Humberto Moreira. Ante los desmanes de Ulises Ruiz (uno de los asesores de Peña) y la eminente descomposición del PRI estatal, Gabino prefirió irse al PRD… y al PAN. Y con Ebrard, par de bribones, sorprendieron la ingenuidad de López Obrador (también ex priísta) logrando que los apadrinara, y ahora coludidos para traicionarlo. Así Gabino llegó a desgobernador, cuando no pocos creyeron que iba a ser un gobernador.

Sacó la espada de Damocles y la puso sobre la cabeza de Ulises. La volvió a envainar. Y transó con él, como lleva su transa con Diódoro Carrasco, le juega el dedo a AMLO y se lleva, con choque de puño (como ahora se saluda), con Calderón. Y como todos éstos lo necesitan, se dejan querer por quien ya demostró que será otro “góber” del montón como: Ulises, Murat, Diódoro, Heladio y una larga fila de mediocres, ladrones, incompetentes, porque nadie tomó como ejemplo al Gobernador Benito Juárez; o al Porfirio Díaz que fue tres meses gobernador. Oaxaca ha generado mujeres y varones ilustres en pintura, letras, abogacía, periodismo y folklore. Y ahí sobreviven mexicanos con cualidades excepcionales para la cultura, el comercio y la agricultura. Gabino es todo lo contrario. Alto, pero nada de grandeza. Y los oaxaqueños están decepcionados de quien bucea entre ulisistas, diodoristas, panistas, perredistas, priístas de viejo cuño o enmielándose en el Panal de la “maistra”.

cepedaneri@prodigy.net.mx