¡¡Exijamos lo Imposible!!
Por Esto!
Todos los días es 19 de julio
María Teresa Jardí
El 19 de julio de 1979 triunfó en Nicaragua la Revolución Sandinista. Y
el 19 de julio de 1936, Barcelona, tomada por la CNT/FAI, se tornó en
rojinegra y a partir de ese momento se le conoció como “La Rosa de
Fuego”.
Sus balcones y ventanas se llenaron de banderas con el color rojo del
sol, de la libertad y de la sangre que fluye por las venas del mismo
color en todas las personas del mundo sin importar el color de la piel
ni el dinero que tengan o que no tengan ni la religión que profesen o en
lo que no crean.
Roja es la sangre de todos sin importar si son niños, si somos mujeres, viejos o jóvenes.
Y con el negro como recordatorio de la muerte que todos vamos a
enfrentar, como la muerte misma nos lo indica al no discriminar a nadie.
Negro también como recordatorio de la parte oscura que también existe
en cada persona. La que hay que combatir cada día incluso para que no
acabe marcando nuestra vida la perversidad que distingue a los
fascistas.
La vida de los españoles cambió ese día para los barceloneses ante el
golpe fascista dado por Franco. Y unidos tomaron las calles también de
Madrid milicianos de la CNT-FAI, de JSU y del POUM. “... Formaron
barricadas y tomaron al asalto a pecho descubierto, con escopetas de
caza, pistolas y navajas los cuarteles. La reacción fue aplastada y el
poder obrero mandaba...”
Al anterior recordatorio, que llena el Facebook, aunque yo lo comparto a
ustedes escrito a mi manera en recuerdo de la mitad de mi familia
anarquista, que participó, por cierto, en la toma de Barcelona, a pesar
de no ser esa la parte catalana que me dio el ser.
Martín Moreno añade el comentario de que “La Juventud Socialista
Unificada (JSU) fue la fusión, desde marzo de 1936, de la Unión de
Juventudes Comunistas de España del PCE y las entonces poderosas
Juventudes Socialistas de España del PSOE... Y, Maia Rioa, dice que “es
una pena el sacrificio de toda esa juventud y gente obrera ... para
ahora tener que llegar a esto… y Martín le contesta que “La historia de
la humanidad es la historia de la lucha de clases...” como bien dijera,
K. Marx”.
Y sí, la lucha de clases sigue y España es el mejor de los ejemplos.
Mariano Rajoy además de ladrón es una mala persona. Cínico y descarado,
no se va, a pesar de los muchos millones de españoles que en la calle
exigen su dimisión. Millones que representan a muchos millones más que
están de acuerdo en que el PP debe finalizar su gestión fracasada de
gobierno; amén de que tendrían que ser castigados por ladrones los
abusadores tornados en mafias políticas.
Rajoy no se va porque se sabe apoyado por el imperio yanqui y por la
Merkel, que de rodillas ante el imperio, o a la inversa, no nos
olvidemos de Hitler, también se encuentra. Leyendo cada día las noticias
de lo que con España ocurre. Donde incluso el suicidio se ha tornado en
una forma de acabar con la vida frente a los desahucios que los bancos
hacen como una forma más de cobrarse por la fuerza los errores, en todo
caso, del gobierno socialista, sin que los banqueros tampoco allá paguen
nunca por sus abusos, que amén de ser ilegítimos lindan en la
ilegalidad, de cara a la memoria, que no debe perderse nunca, en las
redes también, a propósito de su precaria salud y de su cumpleaños 95,
se nos recuerdan las palabras de Nelson Mandela. Palabras que tampoco
tendrían que ser olvidadas por las mafias mexicanas que nos
desgobiernan. Palabras equivalentes al artículo 39 de nuestra
Constitución de 1917. “Si no hay comida cuando se tiene hambre. Si no
hay medicamentos cuando se está enfermo, si hay ignorancia y no se
respetan los derechos elementales de las personas, la democracia es una
cáscara vacía, aunque los ciudadanos voten y tengan parlamento...”.
No les queda más que la dictadura a los depredadores del Planeta que
todo lo controlan. Pero somos millones el resto y es tiempo de que todos
entendamos que el autor de nuestras desgracias es el sistema
capitalista que no tiene ya cabida si de salvar a la humanidad se trata.
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