martes, 1 de noviembre de 2011

Pues para mi el bueno es Martí Batres

¡¡Exijamos lo Imposible!!
De @rivapa @gomezzalce @Ale_BarralesM Mancera y los otros
Federico Arreola @FedericoArreola
2011-11-01

No sé a qué intereses responde Raymundo Riva Palacio ni, desde luego, me voy a poner a averiguarlo. Solo diré que desde hace tiempo juega a quedar bien con grupos con están en el poder. Es su derecho, desde luego. Así que no lo voy a criticar por hacer algo que no viola ninguna ley.

El principal contacto de Riva Palacio en el gobierno del Distrito Federal es mi amiga, y muy amiga de él, Marcela Gómez Zalce, principal asesora del jefe de gobierno, Marcelo Ebrard Casaubón.

Quiero mucho a Marcela, una mujer talentosísima, y esto es algo que no va a cambiar. Pero desde que ella trabaja con su tocayo Marcelo, al fin novata en la política, me ha dejado de hablar. O ya no me habla con la frecuencia con la que antes lo hacía.

Como todos los principiantes, Marcela se esfuerza más que los experimentados en quedar bien. Y como yo no solo apoyo a Andrés Manuel López Obrador para ser el candidato presidencial de izquierda, sino que critico fuertemente a Ebrard (y a su jefe Manuel Camacho), pues la señora Gómez Zalce comprensiblemente me saca la vuelta. No me molesta pues ella ha sido mi amiga durante más de 15 años y lo será siempre.

Cuando Ebrard termine, que ahí terminará, en el basurero de la política, es decir, en el olvido, Marcela y yo volveremos a charlar tan a gusto y tan seguido como siempre. Pero, por lo pronto, ahora casi no nos vemos. Así lo decidió ella, y está bien.

Marcela Gómez Zalce está estrenando su poder, que lo tiene en el GDF, para intervenir en la sucesión en la Ciudad de México. Ella apoya abiertamente para llegar a la jefatura de gobierno al procurador Miguel Ángel Mancera, un tipo de primera que sería, sin duda, un gran gobernante de la capital del país.

Mancera, un funcionario eficaz, honesto y trabajador, debido a su buen desempeño en la Procuraduría y, además, gracias a su carisma, es el segundo mejor posicionado aspirante de izquierda a la jefatura de gobierno.

De hecho, Miguel Mancera es una de las únicas dos personas con las que cuenta la izquierda mexicana para intentar, con posibilidades de éxito, vencer a la priista Beatriz Paredes en las elecciones de jefe de gobierno del próximo año.

Lo anterior significa que Marcela Gómez Zalce, yendo incluso contra su jefe Ebrard, apoya a un gran político.

Pero Mancera, a pesar de sus numerosos virtudes, hay que decirlo con claridad, no es el izquierdista mejor ubicado en las encuestas en la Ciudad de México. Lo supera, con diferencia estadística (esto es importante subrayarlo), Alejandra Barrales.

Les podrá gustar o no a la señora Gómez Zalce y a su amigo Riva Palacio, pero Barrales es la mejor en la izquierda.

No lo digo, yo, sino todas las encuestas. Esto es, se trata de algo perfectamente demostrable. Es un hecho estadístico que Marcela y Raymundo no van a poder alterar con periodicazos digitales realmente muy baratos.

Ignoro qué hizo Alejandra Barrales, pero evidentemente lo hizo, y muy bien, para superar en popularidad a políticos con más presupuesto que ella, como Mario Delgado, el favorito de Ebrard; más favorecidos que ella por la televisión y los grandes diarios, como Miguel Ángel Mancera, el preferido de Gómez Zalce; con más apoyo en la burocracia del PRD, como Carlos Navarrete, uno de los líderes de los chuchos; con más trayectoria en la izquierda radical, como Martí Batres, o con más cercanía con Andrés Manuel López Obrador, como Ricardo Monreal o Porfirio Muñoz Ledo.

Ni modo, que se aguanten los que van perdiendo. No hicieron adecuadamente su trabajo o, en el mejor de los casos para ellos, no supieron realizarlo con tanta eficacia como Barrales.

Esa es la verdad. Todo lo demás es pura grilla.

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