¡¡Exijamos lo Imposible!!La mujer en el siglo XXI
Por Manú Dornbierer
La Academia Mexicana de las Ciencias (AMC) opinó a principios de año que las reformas realizadas a 17 Constituciones políticas locales, para “proteger la vida desde el momento de la concepción”, efectuadas con el apoyo de líderes religiosos y varios partidos políticos, son inaceptables porque socavan la racionalidad política en el país y amenazan con retroceder a etapas dolorosamente superadas hace siglo y medio.
La gran víctima de este retroceso es, obviamente, la mujer mexicana.
En esta vuelta a la Inquisición, a la “edad media” de inmorales políticos tanto del PAN como del PRI y uno que otro perredista, pero eso sí mochos hasta un fundamentalismo pariente del islámico, al servicio de los intereses de la Iglesia Católica en crisis, machista, pletórica de curas pederastas y pedófilos, es ella la mujer, la que carga con todos los males y las acusaciones.
No por casualidad hay tantos feminicidios en el país, en muchos estados, que no causan mayor impresión en el Infierno Federal ni en la opinión pública. Por causalidad y no por casualidad en Quintana Roo, tierra de pornografía infantil a la que tanto combate la valerosa y brillante Lydia Cacho, se obliga hoy a una niña de 10 años a continuar un oprobioso embarazo que le causó su padrastro. ¿La madre de la niña obedece a su pareja, el violador, o a un cura antiaborto o a algún funcionario? No se entiende si no cómo puede arruinar la vida de su propia hija, obligándola a los 10 años a tener un hijo. A esa aberración la lleva la situación de falsa moralidad que se está promoviendo en México.
Y es que El piadoso PRIAN defiende la vida del embrión, pero no de una mujer violada y menos si es una chiquita de 10 años, que desde luego puede perder la vida física en un parto si no la perdió en la violación, pero cuya vida espiritual, emocional, mental están dañadas irremediablemente por una tragedia a la que no se pone coto ni remedio. Recordemos a aquella otra niña, Paulina, que hace unos años fue violada por un drogadicto en Baja California. Las autoridades panistas la “convencieron” de no utilizar la ley federal que le permitía abortar y prohibieron a hospitales públicos cumplir la ley, practicándole el indispensable legrado al que entonces sí tenía derecho. Le prometieron ocuparse de ella y del producto de la inmunda y traumática experiencia. Ocasionalmente se supo en la prensa que la niña estaba en la miseria con el producto salvado por la infinita bondad panista, misma responsable de la muerte en la narco guerra de más de 22 dos mil mexicanos. ¡Un embrión es más importante que la vida de miles! NO MATARÁS, dice el mandamiento y ¿qué es más grave, detener el desarrollo de un embrión o cortar de tajo vidas hechas y de familias? Que se sepa en México no hay pena de muerte y menos sin ningún juicio ni investigación, pero mueren diariamente miles en esa situación. Ah, pero los civiles muertos, niños o adultos son poquitos, diría Calderón.
La prohibición al aborto y la ausencia de legislación contra los machos abusadores lo que hace en realidad es promover la violación, la pedofilia, la pederastia, la promiscuidad. En suma, entre la religión y los gobiernos del PRIAN, la mujer mexicana está siendo nuevamente esclavizada, encarcelada por pretender disponer de su cuerpo, por no estar dispuesta a echar a este mundo a seres sin ninguna garantía de una vida elementalmente digna. Muchas de las que abortan son más responsables que las que no lo hacen. Y con frecuencia perecen en total impunidad y sin consecuencias para sus victimarios.
En los estados antiaborto las criminalizan los que defienden la vida, dicen, pero que nada han hecho para penalizar a los que por violación evidente o no, han producido el embarazo que rechazan las mujeres. ¿Cuáles son los castigos a la sexualidad brutal, al abuso de las mujeres por sus familiares que propicia la promiscuidad, cuales se aplican a los pedófilos? ¿La legislación considera que la mujer es un objeto sexual a disposición de cualquier hombre, sea o no su pareja, y que es su deber dar a luz a sin discriminación alguna? Creen que es obligación de la mujer proseguir cualquier embarazo que se le inflija, sea el que sea y como sea. Entonces están violando sus derechos humanos. Consideran a la mujer un ser inferior y por si no lo recuerdan, todos los ciudadanos son iguales frente a la Ley.
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