2009-03-20
No hay peor decisión, mi estimado, que la indecisión.
El atrevido concierto de acusaciones, señalamientos, fanfarronerías e imputaciones de un (des)gobierno en medio de la crisis… dentro de la crisis del Gymboree, augura que lo que mal comienza, mal acaba, haiga sido como haiga sido. Y estos genios de la residencia oficial y del partido fallido, no están midiendo el peso de su irreflexión en su campaña contra las simpáticas lacritas tricolores.
Pero a Felipe & his dumb squad no parece preocuparles la volatilidad del contexto y su original fragilidad. Al contrario.
Calderón más bien está (¿en la nube sideral?) en eso de vender la imagen del México real y en la comida con los príncipes herederos de Noruega, Haakon y Mette-Marit; presumió la modernización y la experiencia de la empresa, Statoil Hydro, invitándola para emprender negocios energéticos en la exploración profunda. De pelos. Pero (siempre hay un pero) entre la comitiva que vino a la gira estuvo el presidente Arve Bakke y el secretario general Atle Hoie, del poderoso Fellesforbundet (Federación Unida de Sindicatos Noruegos), cuya preocupación por la sistemática violación a los derechos laborales los tiene, digamos, intranquilos.
Y entre los magníficos puntos de ocupación nórdica estuvo el asunto de los mineros y el atropello jurídico contra Napoleón Gómez Urrutia, por lo cual visitaron en la cárcel a Juan Linares Montufar para conocer de viva voz sobre las complicidades de Germán Larrea y el (des)gobierno de Calderón para aplastar al precio que sea y como sea al aguerrido sindicato.
Quizá le parezca peccata minuta la cuestión aunque… not so fast.
Con la novedad de que el Fellesforbundet tiene voz y voto en importantes decisiones no sólo de gobierno sino de empresa, sobre todo cuando de inversiones millonarias se trata en países donde los derechos humanos y laborales son sistemáticamente vulnerados... y el asunto de los mineros, que ya es epicentro sindical internacional de alarma, los tiene perturbados, y como Noruega no es México, sí hay sumo interés y habrá mucha presión por encontrar algunas respuestas que en su visita no fueron acordes a las versiones oficiales sobre el caso.
Y como timing is everything, el Fellesforbundet es miembro de la FITIM, que agrupa a más de 25 millones de trabajadores de los sindicatos más poderosos de 100 países y de la ICEM (International Federation of Chemical, Energy, Mine and General Workers Unions), que agrupa a 20 millones de trabajadores en más de 70 países. Ambas con sede en Ginebra Suiza. ¿Entonces?
Con la visita anunciada de Barack Obama a México, los USW y los Teamsters (miembros de ambas agrupaciones) ya están trabajando en documentos y con sus contactos en Washington —no olvide que Joe Biden le debe su curul a los United Steelworkers– para poner en la agenda el tema de… ¡adivinó usted!... los mineros y Gómez Urrutia. Además, claaaro, del TLCAN en el rubro laboral y ambiental.
Así que la visita estadunidense dará para varios temas de importancia bilateral... pero el asunto del sindicato minero y su líder, my friend, será tema.
Un simpático tema.
Por la Mirilla
Y dos.- Lo de Banamex es gasolina al incendio…
¡Adiós!
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